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Aguafuertes
Kitap hakkında
En «Aguafuertes», Jesús del Campo pinta una colorida estampa del Barroco, un tiempo en que el aire olía a pólvora y los mares a especias. Cada una de estas extraordinarias viñetas—de tono costumbrista pero trazadas con la finura del historiador—nos trasladan a una época cuyos afanes y violencias no fueron obstáculo para el erotismo y el amor, y en cuyas batallas e intrigas se intuye la eterna «danza de los mortales en los caminos tramposos de la vida». Campesinos, exploradores, músicos errantes, soldados, comerciantes, espías y nobles de vida ociosa ofrecen en este relato caleidoscópico una imagen de lo humano con todos sus claroscuros.
«Sutil estilista y narrador potente, culto y canalla al mismo tiempo, sólido y juguetón, transparente y perverso, Del Campo resuelve a su favor todas las paradojas de la escritura».
Enrique de Hériz
«Muy acertados el tono y la voz. Tiene buen ojo Del Campo para la disección de los tiempos».
Olga Merino, El Periódico
«Los juegos literarios, que nos mueven de la Historia con mayúsculas a las historias cotidianas, de los hechos excepcionales a los sueños, la fantasía y la mera invención, están presentes en todos y cada uno de los párrafos que constituyen estos aguafuertes».
M. S. Suárez Lafuente, La Nueva España
«Aguafuertes sorprende por su originalidad y también por la depurada escritura, de ambición cervantina. Una fórmula feliz para acentuar el aire de fábula en el retrato de los males que afligieron a la población durante aquel siglo convulso y que hoy siguen siendo reconocibles».
Iñigo Urrutia, El Diario Vasco
«Por el libro, lleno de conflictos, aventuras y erotismo, pululan un elenco de personajes que ofrece al lector un variado muestrario de las pasiones humanas en un periodo convulso de la historia que, de alguna manera, puede ser también un reflejo de nuestro presente».
Iñigo Linaje, El Correo
«Jesús del Campo escribe extraordinariamente bien, y Aguafuertes es un valioso retablo configurado sobre la plancha base del escepticismo, que se cubre luego con un excelso barniz de metáforas».
Fulgencio Argüelles, El Comercio
«Jesús del Campo muestra las entretelas del XVII mejor que ningún tratado histórico sesudo».
Fermín Herrero, El Norte de Castilla
«Un maravilloso viaje al barroco».
Victòria Palma, El gran tour (3Cat)