Kitabı oku: «Aplicación de métodos de control fitosanitarios en plantas, suelo e instalaciones. AGAC0108», sayfa 2

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5. Clasificación: espolvoreadores, pulverizadores, atomizadores, fumigadores, nebulizadores.

Según el tipo de fase en que se vayan a aplicar los productos fitosanitarios, se clasificarán del siguiente modo:


CLASIFICACIÓNEQUIPOS DE APLICACIÓN Y SUS TIPOS
Polvos para espolvoreoEspolvoreadoresManuales- De mano- De mochila
MotorizadosCañones de espolvoreo
Productos líquidos o mezclados con aguaPulverizadoresHidráulicos o de chorro proyectado- Barras herbicida- Carretillas de tratamiento (pistolas)- Mochilas de tratamiento
Hidroneumáticos o de chorro transportado- Atomizadores- Cañones de pulverización
Productos líquidos o mezclados con aguaPulverizadoresSistemas centrífugos o U.L.V.
Nebulizadores
Sistemas de quimigación (riego por goteo)
Productos en forma de gasFumigadores

6. Principales máquinas y equipos

La elección del equipo más adecuado para la realización de los tratamientos se hará principalmente en función del tipo de sustancia a emplear. A continuación, se describirán las principales máquinas de aplicación de plaguicidas, así como sus componentes más destacados.

6.1. Espolvoreador

Dependiendo de cómo se genere la corriente de aire y la agitación del producto a aplicar, se pueden hacer dos grandes grupos, los manuales y los motorizados.

La principal diferencia entre uno y otro es, por un lado, el alcance, mucho mayor en los motorizados, (aproximadamente 30-40 m) y por otro lado, el rendimiento por unidad de tiempo, mucho mayor, como es lógico, en los medios mecánicos.

Manuales

El sistema consta básicamente de un receptáculo más o menos grande donde se encuentra depositado el producto en forma de polvo y un “acordeón” que puede ser accionado de forma manual (fuelle espolvoreador) o semiautomática (mochila con fuelle incorporado).

Estos sistemas no son muy precisos aunque sí bastante económicos y utilizados para pequeñas superficies y zonas de fácil acceso para los operarios.


Motorizados

En estos sistemas podemos diferenciar dos partes. De un lado, la zona de producción de polvo, constituida básicamente por:

1 Depósito o cajón, donde se almacena el producto.

2 Agitador, su misión es remover el contenido del depósito para evitar su compactación.

3 Sistema de alimentación del polvo, comunica la zona de producción de polvo con la de generación de la corriente de aire. En esta zona suele existir algún sistema de regulación para dosificar la cantidad de polvo que sale al exterior.

Por otro lado, se encuentra el sistema de generación de la corriente de aire, compuesto por los siguientes elementos:

1 Un ventilador, que genera una corriente de aire a gran velocidad.

2 Una tobera o envolvente, que canaliza la corriente de aire y dirige la aplicación hacia la zona deseada.

Todo el sistema funciona gracias a la energía que le suministra el motor del tractor a través de la toma de fuerza del mismo y se ve optimizado con la acción de un multiplicador que consigue aumentar la velocidad del ventilador hasta el régimen de revoluciones óptimo.

Dependiendo del tamaño del equipo, este podrá ir suspendido si es pequeño, o arrastrado si se trata de un equipo de mayores dimensiones.


Consejo

Nunca oriente la salida del espolvoreo en contra de la dirección del viento o se verá mermado el alcance y obtendrá una distribución muy irregular.

6.2. Pulverizador hidráulico

Dependiendo de la forma en la que se comunique la presión al líquido para producir la pulverización, también encontraremos sistemas motorizados y manuales.

Pulverizador hidráulico motorizado

El pulverizador hidráulico o de chorro proyectado, motorizado, tiene como principales elementos, los que se describen a continuación.

Depósito

Es el recipiente donde se almacena el caldo a distribuir. Suelen ser de polietileno, fibra de vidrio y, en menor proporción, de acero inoxidable, siendo los del primer material los más utilizados por su alta resistencia, menor coste y fácil mantenimiento.


Depósito de fibra de vidrio

Todos los depósitos deben estar equipados con agitadores, que permiten que el caldo se mezcle homogéneamente (pueden ser sistemas mecánicos o hidráulicos). Además, deben contar con un nivel para comprobar en todo momento de cuánto líquido se dispone.

Las configuraciones que pueden adoptar estos depósitos varían mucho en función del fabricante y la capacidad del líquido a almacenar, pero en todos los casos deberán asegurar una fácil limpieza, una adecuada agitación y total estanqueidad.

Para el llenado de estos depósitos se podrán utilizar sistemas de carga externos (por ejemplo, toma de agua exterior) o bien el propio equipo podrá contar con un sistema de autoabastecimiento, denominado hidrocargador, el cual deberá contar con el correspondiente sistema anti retorno para que en ningún caso el contenido del depósito a llenar pueda mezclarse con la zona de abastecimiento de agua limpia.

Además del depósito principal, debe existir como mínimo un depósito auxiliar para que el operario pueda lavarse con agua limpia en cualquier momento, teniendo este una capacidad mínima de 15 l.

Bastidor

Es el soporte físico, por lo general una estructura metálica, que servirá de apoyo y sostén a los diferentes elementos de la máquina.

Su diseño variará en función de si el conjunto irá suspendido en la parte trasera del tractor al enganche de tres puntos, o si por el contrario se tratará de un sistema arrastrado, en cuyo caso se unirá al tractor a través del punto fijo de enganche.


Detalle del bastidor

La bomba

Es el elemento encargado de transformar la energía mecánica en energía hidráulica, que a su vez es transferida al fluido a aplicar.

Puede utilizar la propia energía del tractor, o bien de algún motor auxiliar.

Aunque hay de diversos tipos, las más utilizadas por su bajo costo son las de membrana, pero independientemente de su tipo y la potencia de las mismas, todas irán provistas de un sistema de regulación que proporcione una presión continua al líquido, evitando que este salga por las boquillas en forma de “pulsos”, a este elemento se le denomina amortiguador.


Bomba y válvulas

Filtros

Son dispositivos que sirven para eliminar las posibles impurezas que lleve el caldo que se esté utilizando, previniendo así obstrucciones e incluso taponamientos, tanto en las conducciones como en la bomba y las boquillas.

Generalmente, los pulverizadores hidráulicos tienen tres filtros: uno en la boca del depósito, otro en la aspiración de la bomba y el último en la impulsión de la misma.


Sistema de filtrado


Consejo

Elija filtros con tamaño de luz inferior al tamaño del orificio de las boquillas, así prevendrá mejor las obturaciones.

Sistema de regulación

El conjunto de elementos que lo componen pretende homogeneizar la distribución del producto, de modo que se consiga realizar una aplicación uniforme, regulando el caudal y la presión de funcionamiento.

En el caso de los equipos motorizados, existen diferentes sistemas que acomodan la presión suministrada por la bomba a la velocidad del vehículo en función de las revoluciones por minuto (r. p. m.). de la toma de fuerza, sistemas GPS, etc.).

Para constatar que el sistema está funcionando a la presión adecuada, se utilizan manómetros, que indican la presión del líquido en la tubería, por lo que es muy importante comprobar periódicamente que estén en buen estado.


Manómetro con escala normal


Definición

r. p. m. o revoluciones por minuto

Son el número de vueltas completas (revoluciones) que da un sistema giratorio en un minuto de tiempo.

Grifería y conducciones

La grifería permite el transporte del líquido hasta el lugar deseado, regulando su paso mediante un sistema de llaves de paso o válvulas.

En el caso de las barras de herbicida, las conducciones finales de distribución estarán apoyadas en la propia barra portaboquillas, pero en el caso de que se utilicen otros sistemas de aplicación como las pistolas, estas conducciones finales serán portadas por el operario.


Detalle de grifería y conducciones

Barra portaboquillas

Son las estructuras en las que se alojan las boquillas. En el caso de las barras de aplicación de herbicidas, son estructuras que deben permitir una distribución uniforme a intervalos regulares de las boquillas. Del mismo modo, deben garantizar que todas las boquillas se encuentran a la misma altura sobre la zona a tratar, por lo que dichas estructuras suelen contar con sistemas hidráulicos, manejados desde el tractor.

Boquillas

Son los elementos encargados de transformar la vena líquida que circula por las tuberías del sistema en una pulverización del tamaño de gota deseado.

Existen diferentes tamaños de gota recomendados en función del tipo de fitosanitario a usar.

De todos los componentes del sistema, son los más importantes a la hora de que la pulverización alcance la distribución, tamaño de gota y población de gota necesarios para el éxito del tratamiento.


Ejemplo

Para una misma velocidad y presión de trabajo, podemos duplicar o triplicar el caudal de aplicación, dependiendo del paso de boquilla seleccionado.

Existen boquillas de diferentes materiales (latón, acero inoxidable, plástico endurecido, etc.) pero las más utilizadas son las cerámicas, debido a su gran dureza y resistencia al desgaste. Esto las hace más fiables debido a que el orificio de salida del líquido se mantiene inalterable durante más tiempo, proporcionando por tanto una pulverización uniforme en periodos más largos.


Diferentes tipos de boquillas


Tamaño de gota (micras)Tipo de producto
150-200Fungicidas
200-350Insecticidas
350-600Herbicidas

Dependiendo del tipo de pulverización que queramos realizar, elegiremos entre:

Boquilla de hendidura o abanico

Son boquillas que producen una pulverización en forma de abanico con un ángulo que oscila entre los 65º y 150º.


Son las usadas en las barras de aplicación de herbicidas que, colocadas a intervalos regulares en dicha barra y utilizadas a la altura adecuada (50 cm de distancia entre boquillas y 50 cm de altura sobre el suelo para un ángulo de 110º), proporcionan una banda continua de pulverización.

Una variante de este tipo de boquillas es la denominada antideriva o injet, que reduce el riesgo de deriva gracias a la formación de pequeñísimas burbujas dentro de cada una de las gotas que componen la pulverización.

Generalmente, este tipo de boquillas se utiliza para aplicaciones dirigidas al suelo, a cultivos de bajo porte o en tratamientos dirigidos a praderas o céspedes.

Boquillas de turbulencia

Debido a su configuración, producen a su salida un cono (hueco o lleno) de gotas finísimamente pulverizadas, que crean una nube turbulenta que garantiza una gran penetración del producto en las cubiertas vegetales, aunque estas sean muy densas.


Es el tipo de boquilla utilizado en los pulverizadores hidroneumáticos y con las pistolas de tratamiento, siendo idóneas tanto para la aplicación de fungicidas como de insecticidas, así como de abonos foliares (nitrato potásico disuelto en agua, por ejemplo).


Pistolas de tratamiento

Boquillas de espejo

En estas boquillas, frente al orificio de salida, hay una zona inclinada donde se produce el choque del líquido pulverizado, creando un “paño curvo” de hasta 160º y con un alcance aproximado de 1 m.

El tamaño de gota generado es más grueso que el de las de abanico, lo que las hace muy adecuadas para la distribución de herbicidas.


Además de los tipos de boquillas antes mencionados, existen otras con configuraciones especiales, como pueden ser las boquillas terminales, las extremas o las de envés, que se utililizan en condiciones de trabajo específicas y para facilitar la penetración de la pulverización a zonas del cultivo de difícil acceso.

La elección de las boquillas se hará por tanto en función del caudal a suministrar y la presión de trabajo de nuestra máquina. Para ello, existen ábacos y tablas de elección de material suministrados por los propios fabricantes, que asignan códigos de colores a las diferentes boquillas, facilitando su selección y uso.

Una variante más pequeña de los pulverizadores hidráulicos es la denominada carretilla de tratamiento, integrada por los mismos elementos detallados anteriormente, pero de un tamaño más reducido que el sistema tractor-barra herbicida. Su diseño está pensado para ser manejada por un solo operario, que realizará las aplicaciones con pistolas de tratamiento, ya que son fáciles de manejar y, por tanto, muy útiles para tratamientos a pequeña escala.


Carretilla de tratamientos

Pulverizadores hidráulicos manuales

Se trata de las populares mochilas de palanca, muy útiles para la realización de tratamientos de poca envergadura. En este caso, la presión necesaria para realizar la pulverización se consigue con el accionamiento manual de un pistón de compresión por parte del operario a través del accionamiento de una palanca conectada a dicho pistón.

Los principales elementos de los que consta son:

1 Depósito.

2 Palanca de accionamiento del pistón.

3 Agitador (según modelos).

4 Pistón y sistema de regulación de presión (calderín).

5 Lanza o varilla.

6 Tubería flexible.

7 Boquilla.

Al ser un sistema muy básico, la uniformidad de la aplicación dependerá en gran medida de la habilidad del operario, tanto para que la presión de trabajo sea la adecuada, como para que la distribución de la nube de pulverización se reparta y penetre de forma eficaz en la planta.



Recuerde

La uniformidad de la aplicación dependerá en gran medida de la habilidad del operario.

6.3. Pulverizador hidroneumático

Como ya se dijo anteriormente, estos sistemas se caracterizan porque el transporte de las gotas pulverizadas por la boquilla hasta la planta se hace utilizando una corriente de aire generada por la propia máquina.

Atomizador

En estos equipos conviven dos sistemas claramente diferenciados. Por un lado, tendremos los elementos que componen el circuito de producción de aire, y del otro, los elementos del circuito de líquido.

Circuito de producción de aire

Su misión es generar una corriente de aire de gran caudal y baja velocidad que transporte las gotas pulverizadas hasta su destino y que además produzca una agitación de la masa vegetal, favoreciendo la penetración del producto aplicado.

Como principales elementos de este circuito, citaremos los siguientes.

Hélice

De un número variable de palas, es la encargada con su rotación de generar la corriente de aire.


Hélice de atomizador protegida por una rejilla

Multiplicador

Su misión es incrementar la velocidad de giro de la hélice, aumentando las r. p. m. que llegan desde el tractor a través de la toma de fuerza.

Carcasa o cubierta

Se trata de un anillo que rodea la hélice y que conforma la aspiración y la zona de salida del aire.

Difusor o deflector

Situado inmediatamente a continuación de la zona de salida de la carcasa, es el responsable de canalizar el aire y distribuirlo de manera uniforme hacia el lugar donde se encuentran colocadas las boquillas. Su número es variable, siendo lo más habitual encontrar uno o dos.

Rejilla

Se sitúa a la entrada y salida de la carcasa para impedir la entrada de objetos extraños que dañen la hélice, así como para impedir accidentes.

Sonda de detección de objetos

Tiene por cometido detectar la presencia de los árboles, arbustos o setos a tratar con objeto de favorecer el ahorro de caldo de tratamiento.

Son sistemas de ultrasonidos situados cerca del portaboquillas, que dan al distribuidor la orden de dejar pasar o no caldo al arco portaboquillas correspondiente.


Circuito de líquido

Se trata de un sistema muy parecido a los vistos para el pulverizador de chorro proyectado. Sus principales elementos son:

1 Depósito.

2 Bomba.

3 Filtros.

4 Sistema de regulación y grifería.

5 Conducciones.

6 Arco portaboquillas.

7 Boquillas.

Solo en los dos últimos elementos, arco portaboquillas y boquillas, existen diferencias apreciables.

En cuanto al arco portaboquillas, se compone de dos conducciones situadas junto a la salida de aire, con alimentación individualizada, sobre las que se encuentran situadas las boquillas. Esta alimentación sectorizada permite que se accionen una o las dos baterías de boquillas de forma independiente, reduciendo el gasto de producto aplicado en zonas en las que no exista vegetal a tratar.


Detalle de la carcasa, portaboquillas y difusores

En cuanto a las boquillas, la principal diferencia respecto a los sistemas de chorro proyectado es que en los atomizadores suelen utilizarse boquillas de turbulencia.

Otro sistema similar a los atomizadores anteriormente descritos, son los denominados cañones de tratamiento. Se trata de sistemas con la misma configuración de los atomizadores, a excepción de que la salida del aire del ventilador se encauza a través de una tobera (cañón) que conduce la pulverización en una dirección determinada.


Sabía que...

Los cañones de tratamiento son muy utilizados para aplicaciones de fitosanitarios en arbolado urbano.

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