Kitabı oku: «Lo que los angeles anhelan leer», sayfa 2
Prefacio
Estambul. Constantinopla. Bizancio.
Tres nombres diferentes para la misma antigua y extraordinaria ciudad. Esta ciudad es un puente entre Oeste y Este, entre los dos continentes: Europa y Asia. Ya no es la capital de Turquía, pero sigue siendo el corazón cultural del país. Mi primera visita en 2008 fue el cumplimiento de un sueño de toda la vida. La historia única de la ciudad parece brillar en cada esquina, con restos en cada lugar de los antiguos griegos, del Imperio romano tardío, del cristianismo bizantino y del islam otomano.
Posteriormente al estar involucrado en la capacitación de predicadores turcos, sentí que otro sueño se hacía realidad. ¡Qué privilegio! especialmente porque en la última década he tenido la oportunidad de hacer buenos amigos en la pequeña iglesia de habla turca en ese país de mayoría musulmana. Son una pequeña minoría- tal vez unos miles- en una población de casi 80 millones.
Una pequeña serie que prediqué ahí, siempre estará presente en mi mente, no tanto por su impacto en la congregación, sino por su impacto en el predicador. Estaba trabajando en los dos primeros capítulos de 1 Pedro durante un taller de fin de semana sobre cómo predicar las epístolas. Solo había diez de nosotros en la sala. A pesar del calor, las constantes llamadas de la tarde a la oración nos había obligado a cerrar las ventanas. Luego leí la línea de apertura de Pedro:
Pedro, apóstol de Jesucristo, a los elegidos, extranjeros dispersos por el Ponto, Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia…
De repente me di cuenta que Pedro estaba escribiendo a hermanos y hermanas que vivieron hace dos milenios en el mismo lugar donde yo estaba. En su día, la región era conocida como la provincia romana de Bitinia. Entonces, como ahora, los creyentes constituían una minoría minúscula, rodeados por una mayoría cultural que ni entendía ni respetaba sus creencias. En algunos momentos esta falta de respeto se convirtió en persecución e incluso el martirio.
Pedro escribió para pastorear, alentar y fortalecer a aquellos creyentes aislados y a menudo vulnerables. Sus palabras han consolado y desafiado desde entonces. Su táctica es mostrar como el evangelio eterno es verdadero incluso en las situaciones más difíciles- y eso es porque Dios está realmente en control (1P 1:2-9). Uno de sus argumentos es realmente sorprendente.
Los profetas, que anunciaron la gracia reservada para vosotros, estudiaron cuidadosamente esta salvación. Querían descubrir a qué tiempo y a cuáles circunstancias se refería el Espíritu de Cristo, que estaba en ellos, cuando testificó de antemano acerca de los sufrimientos de Cristo y de la gloria que vendría después de estos. A ellos se les reveló que no se estaban sirviendo a sí mismos, sino que os servían a vosotros. Hablaban de las cosas que ahora os han anunciado los que os predicaron el evangelio por medio del Espíritu Santo enviado del cielo. Aun los mismos ángeles anhelan contemplar esas cosas. | ||
--1P 1:10-12 |
Medita en esa última oración por un momento.
Significa que poder estudiar las Escrituras es nada menos que un privilegio celestial. ¡Cada vez que abrimos las Escrituras, somos atraídos a una experiencia que los siervos celestiales de Dios no tienen! Eso es presumiblemente porque aquellos que constantemente viven y sirven en la presencia de Dios en realidad no necesitan que se les revele estas cosas. Sin embargo, el no necesitar una Biblia no es suficiente para calmar la curiosidad angelical acerca del evangelio. ¡Aparentemente les encantaría tener lo que nosotros tenemos y hacer lo que hacemos!
¡Qué ánimo fue para nosotros al abrir las Escrituras ese día! A pesar de estar rodeados de millones que consideraban lo que hacíamos irrelevante, A los diez que estábamos en esa sofocante habitación de Estambul nos resultó profundamente inspirador. La Escritura nos dio una nueva audacia para predicar más allá de esas cuatro paredes, cuando y donde fuera que tuviéramos la oportunidad.
Nunca debemos olvidar esto mientras consideramos como proclamar lo que se reveló a Pedro y a sus amigos y a los compañeros del evangelio. Nuestro sentido del privilegio nunca debe desvanecerse. Curiosamente mientras más estudio y predico la Biblia, más profundo se hace ese sentimiento. Me asombra más su mensaje, su coherencia y consistencia, su belleza y sus sorpresas. Esto me impulsa a proclamarlo.
Espero que tengas una experiencia similar mientras lees este libro. Es ciertamente lo que deseamos para los movimientos de predicación de Langham en el mundo entero. Esto es porque el aprender y crecer como predicadores no es simplemente una cuestión de afinar nuestras habilidades, o memorizar información, o incluso mejorar como comunicadores (aunque todas esas cosas tienen su lugar - y este libro tendrá un enfoque claro en el desarrollo de habilidades). No se trata ciertamente de ganar puntos suficientes para avanzar en la escalera ministerial. Es simple y maravillosamente, tomar conciencia del privilegio que tenemos de servir a nuestro misericordioso Dios como sus embajadores y proclamadores.
Capítulo 1
Comprensión del panorama general de la Biblia
Cada vez que visito un lugar nuevo, quiero ver un mapa de este. Sin mapa, me siento bastante desorientado. Esto fue especialmente cierto cuando visité Estambul- pero me pasa incluso en zonas de mi ciudad natal, Londres. Aunque nací aquí, y ha sido mi hogar de forma intermitente durante muchos años, existen muchas partes de las que ni he escuchado, y ni siquiera he explorado. ¡Me podría perder fácilmente!
Aquí es donde vemos la utilidad de los mapas. Los mapas ayudan a poner todo en contexto, a nivel mundial, nacional y local. Por lo tanto, son cruciales para la planificación de cualquier viaje. Pero necesitamos diferentes tipos de mapas para ayudarnos con las diferentes etapas en la planificación de un viaje.
Mapas continentales: Estos son mapas con un panorama general, los que nos permiten ver a un continente de un solo vistazo. Muestran los principales puntos de referencia como las montañas, océanos y ríos, y los límites entre países. Si sé que Estambul está en Turquía, un mapa continental muestra la ubicación de Turquía en relación con los demás países.
Mapas nacionales: Estos mapas cubren un país completo, como Turquía y están destinados a ayudar a los viajeros a llegar de un lugar a otro. Nos mantienen en las direcciones correctas entre ciudades y pueblos mostrándonos solamente los lugares y carreteras más significativos. Omiten detalles que distraigan o confundan. Al utilizar un mapa nacional, puedo encontrar mi camino hacia Estambul fácilmente.
Mapas locales: Una vez que llego a Estambul, sin embargo, un mapa continental o un mapa nacional son inútiles si trato de moverme por la ciudad. Lo que necesito ahora es un mapa local, que muestra los pequeños detalles y puntos de referencia como mezquitas, tiendas y callejones escondidos.
¿Pero qué tiene que ver esto con la Biblia?
La respuesta es que te puede ser útil pensar en la Biblia como un vasto territorio que debes explorar. Existen, por supuesto, partes que conocemos bien y que naturalmente preferimos si nos dan la elección. Pero, aun si hemos estado estudiando y predicando acerca de la Biblia por muchos años, existen todavía partes que nos confunden o que parecen plantear más preguntas de las que quisiéramos. Esto es inevitable con un libro tan diverso y profundo como la Biblia. Contiene lo suficiente para ocuparnos toda una vida. Es por ello que el teólogo del s.VI conocido como Gregorio el Grande describió la Biblia como un río que es lo suficientemente superficial como para que los corderos puedan atravesar y lo suficientemente profundo para que los elefantes puedan nadar. Tiene sorpresas y tesoros tanto para el niño como para el erudito, tanto para el nuevo convertido como para el miembro más veterano de la iglesia.
Siempre hay cosas que aprender, y seríamos sabios si aprovecháramos toda la ayuda que podamos conseguir. El propósito de este libro, y de su compañero, el libro de Chris Wright Cómo Predicar desde el Antiguo Testamento,[2] es ayudarte mientras exploras la Biblia proporcionándote mapas de diferentes niveles… que te permitan estar mejor equipado para ayudar a otros a entender las Escrituras.
1. Mapas de viajes bíblicos
A medida que leas este libro, encontrarás ciertos símbolos que indicarán qué clase de ‘mapa’ de la Biblia estamos viendo en este momento.
Continentes bíblicos: Podemos pensar en el Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento como dos continentes, juntos, como África y Asia que están vinculados a través del Oriente Medio. Esta es una mirada global de la Biblia, que explica la importancia de captar lo que a veces se denomina Teología Bíblica (los temas y la historia que dan a la Biblia unidad). Ya que la Biblia es en realidad una historia, esto se denomina a veces su historia o linea narrativa. Utilizo un mapa de África para indicar lugares a los que estamos dando una mirada ‘continental’.
Países del Nuevo Testamento: Porque es un país que significa mucho para nuestra familia (y es donde mi esposa nació), voy a utilizar un mapa de Uganda como símbolo para indicar que nos estamos enfocando en elementos clave del Nuevo Testamento. Podemos hacer esto de dos formas diferentes, pero ambas son igualmente validas: dando una visión general de cada libro,[3] o haciendo un mapa de los diferentes tipos de terreno que encontraremos. En este libro, tomaremos el segundo enfoque y consideraremos cuatro terrenos clave del Nuevo Testamento:Narraciones (como en los Evangelios y Hechos)Parábolas (las historias que Jesús contó)Cartas (a individuos y a grupos)Apocalíptico (las visiones vívidas y sueños que encontramos especialmente en Apocalipsis)
Localidades en el Nuevo Testamento: Aunque tengamos un buen conocimiento del terreno del Nuevo Testamento, puede que todavía nos encontremos perdidos en cadenas de palabras que no nos permitan encontrar un camino. Así que el libro también incluye mapas locales para ayudarnos a encontrar un camino a través de ciertos párrafos y capítulos.
A medida que avancemos, estaremos moviéndonos entre los tres niveles del mapa. Así que deberás imaginarte a ti mismo sentado en un escritorio con tres mapas distintos abiertos frente tí.
Comencemos por ver cómo se vería un mapa continental. Acabo de decir que podemos pensar en el Antiguo Testamento y en el Nuevo Testamento como dos continentes, que están unidos. Para entender a qué me refiero con esto, observa estas importantes palabras de la primera carta de Pedro, que cité en el prefacio:
Los profetas, que anunciaron la gracia reservada para vosotros, estudiaron cuidadosamente esta salvación. 11Querían descubrir a qué tiempo y a cuáles circunstancias se refería el Espíritu de Cristo, que estaba en ellos, cuando testificó de antemano acerca de los sufrimientos de Cristo y de la gloria que vendría después de estos. 12A ellos se les reveló que no se estaban sirviendo a sí mismos, sino que os servían a vosotros. Hablaban de las cosas que ahora os han anunciado los que les predicaron el evangelio por medio del Espíritu Santo enviado del cielo. Aun los mismos ángeles anhelan contemplar esas cosas. | ||
--1 Pedro 1:10-12 |
Cuando Pedro habla acerca de ‘los profetas’, se refiere a todos los escritores del Antiguo Testamento. Estos profetas ‘no se estaban sirviendo a sí mismos, sino que os servían a vosotros’ porque cuando escribieron, servían a la generación del Nuevo Testamento que fueron los primeros testigos del cumplimiento de la predicación de los profetas.
Es posible que la noticia de "esta salvación" fuera nueva para los lectores de Pedro del primer siglo. Pero no era algo que se hubiera inventado recientemente. Dios había dedicado siglos a sentar las bases para que el Mesías de Israel fuese revelado como Jesús de Nazaret. Y todo esto fue consagrado para que nosotros lo leyesemos en las Escrituras Judías. Incluyendo el sufrimiento que Jesús tendría que soportar para cumplir la voluntad de Dios.
Esto significa que es esencial para todos los lectores y predicadores del Nuevo Testamento entender qué enseña el Antiguo Testamento y hacia dónde apunta. ¡Después de todo, abarca más de la mitad de la historia de la Biblia! También nos provee de todas las imágenes e ideas claves, precedentes y expectativas que se desarrollan en el Nuevo Testamento. Leer el Nuevo Testamento sin el Antiguo sería como empezar una película a los dos tercios de su contenido y esperar poder entenderlo todo. Nunca sabríamos quiénes eran cada uno de los personajes y por qué estaban lidiando con sus respectivas batallas.
2. Seguimiento de la historia de la Biblia
En este punto, voy a cambiar mi metáfora de "un mapa" a "una historia" ya que comenzaremos nuestra exploración del "continente" mirando la historia o línea narrativa de la Biblia. Puede que sea una sorpresa para muchos saber que la Biblia entera forma una historia. Es una historia compleja y larga. Pero es a todas luces una historia en su conjunto. ¿Qué significa esto para nuestro entendimiento y nuestra predicación?[4]
Comencemos por preguntarnos qué ingredientes contiene una buena historia. ¿Qué tendrías que incluir si te pidieran contar una historia, tal vez para niños o para un grupo de amigos?
Un contexto interesante: ¿Dónde y cuándo tiene lugar esta historia? ¿Cuáles son los desafíos y oportunidades que presenta? Supongamos que decidiéramos contar una historia de aventura ubicada en la Antártica. El desafío sería entonces obvio: ¡hace frío todo el año!
Personajes atractivos: Los personajes son las personas que protagonizan la historia, mientras más realistas sean mejor. Eso tal vez signifique que nadie es completamente malo o completamente bueno. Así que podríamos enfocar nuestra historia en dos marineros o exploradores muy diferentes: un inglés Robert Falcon Scott, y un noruego, Roald Amundsen. Eran muy diferentes en cultura, trasfondo y temperamento.
Temáticas interesantes: Temas muy parecidos pueden encontrarse en historias de diferentes culturas. Por ejemplo, hay una batalla entre el bien y el mal/injusticia; un peregrinaje o un viaje de descubrimiento; el individuo que supera grandes obstáculos en su camino al triunfo; la tragedia que le sucede a alguien debido a un defecto fatal o a una mala decisión. Claro que existen muchas variaciones de estos temas, y los mismos eventos pueden ser descritos desde diferentes ángulos y de acuerdo a diferentes temáticas. Así que la historia de Amundsen puede ser contada como el sobreponerse a condiciones hostiles para cumplir un objetivo heroico. La historia de Scott puede ser una historia de arrogancia y falta de preparación que se encamina a una tragedia.
Una trama emocionante: ¡Algo que capte la atención tiene que suceder en esa historia! Nuestra historia narra la carrera que se produjó en 1910 para saber quién sería el primero en llegar al Polo Sur. La trama involucrará los desafíos tuvieron que enfrentar ambos equipos. Al final, Amundsen ganó a Scott por 5 semanas, y todos los miembros del equipo de Scott murieron en el camino de regreso.
Ahora miremos cómo se compara la Biblia a esa lista de características que debe contener una historia:
Un contexto interesante: El contexto de la Biblia es el universo de Dios, y en particular nuestro planeta. ¡Eso es automáticamente interesante para nosotros, porque es nuestro hogar!
Personajes atractivos: Los personajes de la Biblia son creíbles e intrigantes (incluso cuando solo aparecen en una o dos páginas). Son como nosotros, lo que sin duda nos ayuda a relacionarnos con ellos. Pero hay una excepción: Dios mismo. Él es el único personaje que mantiene unida toda la historia, y es en realidad el personaje principal. Cuando Él se reveló a sí mismo como Jesús de Nazaret, nos encontramos con la persona más asombrosa que ha caminado sobre la tierra. Él no tenía pecado, tenía un magnetismo especial, era poderoso y a la vez misericordioso, tenía todo el poder, pero sufrió terriblemente. ¡No ha habido nadie como él!
Temáticas interesantes: Los temas de la historia de la Biblia hacen eco de todas las grandes historias del mundo. ¡O quizá sea más preciso decir que las historias más grandes del mundo todas hacen eco de la historia de la Biblia! Así que cuando una historia trata acerca de un individuo que se levanta para defender la verdad a pesar de lo que todo el mundo a su alrededor está diciendo, o cuando alguien es humillado por su arrogancia o experimenta el poder transformador del perdón, sus historias reflejan los grandes temas incluidos por la historia definitiva de Dios.
Una trama emocionante: La Biblia definitivamente tiene una trama conmovedora, pero es una trama tan amplia, que pienso que necesitamos mirarla separadamente de los otros elementos de la historia.
2.1. La trama de la Biblia
Necesitamos estar al tanto de la trama general de la Biblia cuando iniciamos la parte de nuestro viaje relacionada con el Nuevo Testamento. Esto es porque el Nuevo Testamento no puede concebirse por separado – es la continuidad de una trama mucho más grande. Ningún Testamento tiene sentido sin el otro – precisamente porque la Biblia es una gran historia.
El diagrama de arriba establece las partes clave de una buena trama:[5]
Entorno: los personajes se introducen con el trasfondo de la tensión que se avecina.
Conflicto: Causado por un cambio de circunstancias o por los planes y las acciones de uno o más personajes.
Tensión: El conflicto se profundiza mientras la tensión aumenta- en algunas de las grandes historias, no siempre es posible adivinar qué ocurrirá después.
Clímax: Lo que haya causado el conflicto o la amenaza en primer lugar es rebobinado o recuperado.
Resolución: Los resultados de la trama, especialmente en términos de cómo dejarán la situación inicial cambiada o intacta.
La totalidad de la Biblia encaja perfectamente en este patrón, como puedes ver en el diagrama correspondiente a continuación.
Entorno= creación. Es precisamente porque Dios lo creó todo, que está preocupado por mundo y tiene el derecho de gobernarlo.
Conflicto= la caída. La tragedia de Génesis 3 es que las criaturas de Dios rechazan la bendición del reinado de su Creador, con consecuencias devastadoras para toda la creación.
Tensión= ¿Cómo Dios restaurará la creación? Desde Génesis 4 en adelante, la Biblia se pregunta cómo Dios afrontará esas consecuencias. La tensión de la historia deriva enteramente del temor que la rebelión humana pueda frustrar las promesas de Dios.
Clímax= Cristo. Como ya lo hemos visto desde 1 Pedro 1, todo en el Antiguo Testamento anticipaba la máxima expresión del cumplimento de las promesas de Dios. Jesús de Nazaret revela perfectamente a Dios el Padre, provee mediante su Espíritu todo lo que su pueblo necesita para vivir para él, y cumple perfectamente el plan de Dios para la restauración de su creación. Claro está, que no todo ocurre de una sola vez. Veremos el por qué, cuando comencemos a mirar a los evangelios con mayor profundidad. Pero esto al menos está claro: él es el Salvador.
Resolución= La nueva creación: por el triunfo de Jesús en su encarnación, muerte, resurrección y ascensión, existe ahora una esperanza segura de restauración. Pero, como veremos cuando lleguemos al libro de Apocalipsis, la nueva creación será de algún modo aún más perfecta que la creación original (¡aunque es imposible hacernos una idea de esto!).
Como se puede ver a partir de estos diagramas, la historia de la Biblia se está desplegando gradualmente, cada nueva etapa completa lo ocurrido anteriormente. El rey David sabía cosas que Abraham no sabía. Jeremías sabía cosas que David no sabía. Y nosotros sabemos cosas que Jeremías no sabía- porque vivimos después de la última revelación de Dios de sí mismo en Cristo (ver Heb 1:1-4)
¿Por qué es importante comprender este punto? Bueno, piensa en la siguiente afirmación, que he oído decir en cuatro continentes diferentes:
Dios quería restaurar a las personas consigo mismo, así que creó a una nación para que lo siguiera. Ese fue el ‘Plan A’. Él les mostró cómo deberían seguirle, para ello les reveló la Ley, que está resumida en los Diez Mandamientos. Pero fallaron miserablemente en ese intento. El Antiguo Testamento narra esa historia. Así que Dios tuvo que pensar otra alternativa- por eso que envió a Jesús. Jesús es el ‘Plan B’. Donde la ley fracasó, la gracia triunfa.
Si ves la trama de toda la Biblia, reconocerás que lo que se está diciendo es una distorsión que ayuda poco y que siembra confusión. Es verdad que Dios reveló la Ley, y que las personas fallaron en su cumplimiento. Pero si eso fue una sorpresa para Dios, o si le causó problemas inesperados, sería como sugerir que el pecado humano superó a Dios. Y convierte la venida de Jesús en una desesperada misión, como el último recurso. Pero una vez que consideramos la Biblia como una historia coherente, queda claro que Dios y su naturaleza consistente es lo que mantiene todo unido. Eso significa que Dios no tiene ningún ‘Plan B’.
La primera pista de esto aparece al principio, en el juicio de Dios a la serpiente.
Pondré enemistad entre tú y la mujer, y entre tu simiente y la de ella; su simiente te aplastará la cabeza, pero tú le morderás el talón. | ||
--Gn. 3:15 |
Todavía no tenemos una idea clara de quién es esta persona. ¡Pero es una promesa clara de alguién ‘aplasta serpientes’! Alguien que es humano tendrá que hacer esto, y él será herido en el proceso- pero su victoria será completa. Él librará al mundo de la raíz de la caída aplastando la cabeza de la serpiente.
Si nos trasladamos de Génesis a Apocalipsis. ¡No te preocupes mucho acerca de las imágenes por ahora- ya llegará el momento! Juan habla de una batalla cósmica que se librará en nuestro mundo. Fijáte como él describe a Jesús:
A la bestia la adorarán todos los habitantes de la tierra, aquellos cuyos nombres no han sido escritos en el libro de la vida, el libro del Cordero que fue sacrificado desde la creación del mundo. | ||
--Ap. 13:8 |
En otras palabras, el plan de Dios siempre fue que Jesús muriera como “el Cordero” en la cruz. Esto es asombroso. No podemos entenderlo completamente. Pero podemos confiar en la bondad y la gracia de Dios- después de todo, como ya lo hemos sugerido, su persona es el hilo conductor que mantiene a toda la historia unida. No hay ‘Plan B’- todo es ‘Plan A’. Dios es el héroe de Su- Historia.