Kitabı oku: «Labores culturales y recolección de los cultivos ecológicos. AGAU0108», sayfa 2
3.2. Fructificación
La fructificación es el proceso que da origen a la formación de frutos. Este proceso se consigue gracias a la fecundación del ovario de la flor, mediante la fusión del polen masculino y el óvulo femenino, comúnmente denominado cuajado. Este ovario dará origen y albergará a las semillas.
Una vez producida la fecundación, la transformación de flor a fruto se debe principalmente a numerosas divisiones, elongaciones y expansiones celulares, y a la participación activa de hormonas, concretamente el etileno, las auxinas y las citoquininas.
Del estado nutricional de la planta durante la floración y el número de divisiones producidas en el ovario durante la misma dependerá en gran medida el desarrollo final del fruto.
Entre los factores ambientales que participan en el crecimiento de los frutos, se pueden citar la temperatura (favorece la velocidad de desarrollo del fruto y la concentración de vitaminas), el fotoperiodo, el estado hídrico de la planta, la presencia de dióxido de carbono y la disponibilidad de nutrientes de la planta.
Existen una serie de plantas que no precisan de fecundación para la formación de frutos, y se denominan frutos partenocárpicos. Al no haber fecundación, no presentan semillas en el interior del ovario.
El desarrollo del fruto alcanza un momento máximo en su tamaño y detiene la velocidad de crecimiento, momento en el cual el fruto comienza a experimentar una serie de cambios metabólicos y físicos, conocidos como fase de maduración.
Los cambios metabólicos que se producen en un fruto en proceso de maduración son un incremento de la tasa de respiración, la síntesis y liberación de etileno y la degradación o metabolismo de sustancias de reserva almacenadas durante el desarrollo del fruto.
En función de cómo evoluciona y desarrolla la tasa respiratoria y la producción de etileno durante la maduración del fruto, se clasifica a los frutos en dos grupos: frutos no climatéricos y frutos climatéricos. Los primeros se caracterizan por una reducción progresiva de la respiración y, por ende, en la síntesis de etileno; los segundos, por mantener una tasa de respiración importante con algunos picos en sus fases finales de maduración, y por ello una producción de etileno alta. Este tema se desarrollará con más detalle en sucesivos apartados y en el capítulo de recolección, debido a su gran importancia agronómica, que determinará en gran medida el momento de cosecha, su manejo posterior y almacenamiento de cada grupo.
Entre los cambios físicos que se producen durante la maduración de un fruto, están:
1 El cambio de color, debido a la disminución en la actividad fotosintética, se manifiesta la presencia de carotenoides, los cuales estaban enmascarados por la alta concentración de clorofila, además de que se inicia la producción de pigmentos antociánicos.
2 Cambio en la textura, produciéndose la blandura característica de un fruto maduro, debido a que los componentes de la pared celular se van degradando progresivamente.
3 Los materiales de reserva que se han acumulado durante el crecimiento del fruto comienzan a degradarse a compuestos más sencillos que confieren el sabor dulce de los frutos, como azúcares y ácidos orgánicos, además de sustancias fenólicas volátiles que confieren el aroma u olor característico en cada fruto.
Una vez el fruto termina la fase de maduración, inicia un proceso de senescencia o envejecimiento, que se caracteriza por la caída del fruto de la planta o abscisión, hasta llegar a la pudrición o muerte.
Actividades
3. En relación al fotoperiodo, busque varios ejemplos de plantas de día largo, de día corto y de día neutro.
4. ¿En qué consiste la fructificación? ¿Cuáles son los cambios físicos que se producen durante la maduración del fruto?
3.3. Especies y variedades comerciales
Los requerimientos que permiten o no el uso de ciertas especies y variedades vegetales en la producción ecológica están determinados por el Reglamento CE 834/2007 y el Reglamento CE 889/2008. En ellos, se especifican cuáles son los criterios que deben cumplir las semillas y el material vegetal para su empleo en agricultura ecológica.
A continuación, se describen las diferencias principales que existen entre las semillas y el material vegetal que hay disponible en el mercado para su empleo en la agricultura en general:
1 Variedades locales o tradicionales. Estas variedades son fruto de la selección de los agricultores año tras año, obteniendo semillas o material vegetal viable, de aquellos individuos que presenten características beneficiosas en el entorno que se desarrollan, como por ejemplo la resistencia a ciertas plagas, sequía, resistencia al frío, etc. Estas variedades son las más interesantes de cara a su empleo en la agricultura ecológica por su elevada diversidad genética, que les permite adaptarse a posibles alteraciones en el medio donde se desarrollan. Poseen una producción aceptable de muy alta calidad organoléptica y además el agricultor puede obtener sus propias semillas o material vegetal para la siguiente campaña, sin necesidad de tener que comprarlo.
2 Variedades híbridas. Una variedad híbrida se obtiene del cruzamiento sexual seleccionado de una línea macho o padre y una línea hembra o madre, del que se obtiene una descendencia con cualidades superiores que las de sus ascendentes o padres. Estas variedades híbridas son muy productivas y están diseñadas para condiciones ambientales muy concretas, por lo que no poseen una gran adaptación a cualquier cambio desfavorable, además de que no se pueden obtener semillas viables para su utilización posterior, teniendo que volver a comprarlas en el mercado cada campaña.
3 Variedades transgénicas. Son aquellas obtenidas por ingeniería genética, donde se manipulan los genes de la planta para obtener una o varias características concretas, como por ejemplo resistencia a los herbicidas (lo que permite al agricultor usar este herbicida en mayores dosis sin que el cultivo resulte dañado) o la introducción de un gen que genere toxinas contra una plaga en concreto, etc.
En agricultura ecológica se pueden emplear variedades locales e híbridas si cumplen los condicionantes de la normativa, que es que los métodos de obtención de semillas y la producción de material vegetal estén bajo los criterios de la normativa de producción ecológica. En agricultura ecológica está prohibido el empleo de variedades transgénicas.
En todos los estados miembros de la CEE, y por ello en España, el agricultor ecológico dispone de una base de datos en la cual se pueden consultar todas las especies y variedades comerciales previamente registradas y autorizadas para el cultivo en ecológico.
Sabía que...
En España para consultar el registro de semilla y material vegetal autorizado para su empleo en agricultura ecológica, hay que dirigirse a la Web del Ministerio de Agricultura.
En la normativa de producción ecológica se contemplan algunas excepciones que posibilitan el empleo de semillas o material vegetal que no hayan estado bajo los condicionantes de producción de la agricultura ecológica. Estas excepciones de empleo de semillas y material vegetal no ecológico solo se podrán aplicar previa autorización y supervisión del organismo de control y certificación al que el agricultor esté adscrito. Dichas excepciones son las que a continuación se describen:
1 Que no exista en el mercado una empresa que produzca la semilla o material vegetal que se desea implantar.
2 Que la semilla o material vegetal sí exista en el mercado pero que se den las siguientes circunstancias:Que no esté registrada en la base de datos de semillas y material vegetal autorizado.Que una variedad concreta no esté inscrita en la base de datos y las posibles alternativas sí registradas no se adecuen a las necesidades del agricultor.Cuando la empresa autorizada no disponga de la cantidad y/o momento adecuado de la semilla o material vegetal que el agricultor demande con antelación.Por motivos científicos, como investigación, ensayos, conservación de variedades, etc.
En consideración a los aspectos agronómicos, el agricultor ecológico dispone hoy en día de gran variedad de semillas y material vegetal, adaptables a sus circunstancias específicas de cultivo y medioambiente (características comerciales del producto en color, forma y tamaño, resistencia a plagas y enfermedades, características del suelo, época de recolección, resistencia a condiciones climáticas adversas, resistencia a la sequía, tolerante a salinidad, etc.), por lo cual se deberán consultar con bastante previsión las diversas alternativas y proveedores que dispongan de lo que se busca, y en el caso de que no se esté inscrito en el registro ecológico, iniciar el contacto con el organismo de control para autorizar las excepciones anteriormente comentadas.
Actividades
5. Consulte la base de datos y haga una lista de las empresas inscritas dedicadas a la producción de semillas y material vegetal ecológico.
6. ¿Qué diferencias existen entre una variedad local y una tradicional? ¿Conoce alguna variedad local de su zona? ¿Qué es un banco de semillas tradicionales?
Aplicación práctica
Laura ha heredado una huerta de 2 ha con regadío en régimen de producción ecológica ya certificada, y quiere cultivarla de tomate, lechuga y judía verde para exportación.
¿Cuáles son los aspectos a tener en cuenta para la adquisición de la semilla o plantones antes de iniciar el cultivo?
SOLUCIÓN
Laura deberá primero contactar con el organismo de certificación y control de la producción ecológica con el que esté certificada la finca, y definir qué cultivos quiere instalar, y qué variedades específicas de cada una de las especies. Tendrá que consultar la base de datos de semillas y material vegetal autorizado, e informarse vía internet de aquellas empresas que dispongan de las especies y variedades que ella necesita en ecológico, las cuales algunas de ellas puede que no estén inscritas en el registro de productores o no deseen estarlo. En el caso de que alguna variedad en concreto no esté en la base de datos, o bien, que sí esté registrada pero la empresa autorizada en dicho registro no disponga de la cantidad o en el momento necesario que Laura la precisa, podrá adquirir material o semilla no ecológica. Laura está obligada a notificarlo a su certificadora con el objetivo de que esta le autorice por escrito el empleo de semilla o material vegetal no obtenido bajo las prescripciones de la producción ecológica.
4. Equilibrio entre crecimiento vegetativo y reproductivo
Una vez la planta alcanza su estado de madurez y desarrollo, en la cual se produce la floración y fructificación, es de vital importancia mantener un correcto equilibrio entre el crecimiento vegetativo y el proceso reproductivo, pues de no realizarse se verán favorecidas las producciones de órganos vegetativos (hojas, tallo, raíz) en detrimento de la formación de órganos florales y el crecimiento de frutos, con la consecuente pérdida de producción agrícola.
El motivo fisiológico de esta causa se debe a la presencia e incremento en la concentración global de hormonas relacionadas con el crecimiento vegetativo (citoquininas), en relación con aquellas que influyen y participan en la formación de órganos reproductivos (auxinas y giberelinas). Esto provoca una disminución o ausencia en el crecimiento reproductivo, por lo cual la eliminación mediante aclareo o poda de hojas, brotes y ramos reduce dicha concentración de hormonas del crecimiento vegetal en el balance global, por lo que, al aumentar la proporción de las hormonas de la reproducción, se favorece en la precocidad, aumento y calidad de la floración, además de un mejor y mayor reparto de nutrientes en los frutos, al no tener que alimentar tanta masa vegetal. Un aclareo excesivo de masa vegetal puede provocar una deficiente nutrición y un mal desarrollo de flores y frutos, al reducirse excesivamente los procesos metabólicos vitales (fotosíntesis, transpiración, etc.). Otro aspecto que favorece el crecimiento reproductivo es el equilibrio nutricional de la planta, ya que la aplicación en exceso de fertilizantes nitrogenados favorece el crecimiento vegetativo en detrimento del reproductivo.
5. Poda
La poda es una operación de cultivo que consigue modificar el comportamiento, concretamente el crecimiento y desarrollo de la planta, mediante la eliminación de algunas de sus partes vegetativas. La operación de poda se practica tanto en horticultura como en fruticultura, siendo una labor que precisa formación teórica y práctica para una correcta actuación, siendo además uno de los costes de cultivo más importantes en el balance de cualquier cultivo ecológico al que se le practiquen estas técnicas.
5.1. Finalidad de la poda
La finalidad de la poda, mediante cortes seleccionados en la planta que eliminan parte o la totalidad de una o varias partes de la planta, es reconducir a la planta en la obtención cualitativa y cuantitativa de mejores producciones agrarias ecológicas.
La poda modifica a la planta a lo largo de su vida útil, realizándose en el caso de producciones hortícolas generalmente una sola vez, debido a la escasa rentabilidad económica de la producción que supondría elaborarla más veces durante el corto espacio de tiempo que dura el ciclo de las hortícolas, pero en el caso de los frutales, que poseen una vida útil en el campo entre los 10 y 30 años, la poda, de obligada realización, se practica todos los años varias veces en distintas épocas, y la cual es muy intensa durante los primeros años de la plantación frutícola.
Con la poda se obtienen numerosos beneficios que justifican el elevado coste de su ejecución. Con ella se consigue acelerar el crecimiento y desarrollo sexual de las plantas jóvenes, reduciendo el tiempo improductivo, en el cual no se obtiene ninguna producción agrícola, situación que ocurre principalmente en los frutales y algunas hortícolas. Esto conlleva obtener producciones en un menor tiempo, lo que se traduce en una mejor rentabilidad económica.
Con la poda se modifica o crea una sólida estructura o esqueleto en la planta que permite soportar la carga de numerosos frutos, que de no realizarse provocarían por el peso rotura de ramas en la planta. Otra de las finalidades que se alcanza, como se vio en el apartado anterior, es un equilibrio entre el crecimiento vegetativo y el reproductivo, favoreciendo una rápida floración y, por ende, fructificación, y una mejora del tamaño de los frutos.
Otro de los objetivos de la poda es seleccionar partes enfermas de la planta para su posterior eliminación, impidiendo que se extienda a otras partes de la misma o colindantes, e impedir un contagio generalizado, el debilitamiento de la planta o muerte. Eliminando el exceso de densidad de hojas y ramas en las plantas, se consigue favorecer una mejor ventilación de las plantas, evitando contagio y desarrollo de plagas y/o enfermedades. Además, se añade el efecto de una mejor entrada de luz en el interior de la planta, lo que permite un incremento en la formación de yemas florales con respecto a yemas vegetativas.
A continuación, se desarrollarán aspectos generales relacionados con la poda de especies hortícolas y especies frutales.
Poda de especies hortícolas
La poda de las especies hortícolas tiene la finalidad de obtener mejores producciones, acelerando la aparición de flores, favoreciendo el cuajado, la maduración homogénea y el engorde de frutos principalmente.
Ya que en las hortícolas no existe un periodo de inactividad o dormición como en el caso de las especies frutales, la poda en hortícolas se realiza en plena actividad vegetativa, por lo que se puede decir que la poda es en verde.
Como se mencionó anteriormente, la poda de hortícolas precisa de mano de obra cualificada para su ejecución y supone un alto coste, por lo que en algunos casos habrá que evaluar su rentabilidad económica.
En la poda de hortícolas se puede clasificar la poda en función del objetivo perseguido o de los órganos eliminados durante la misma:
1 Según el objetivo o finalidad sobre la planta y la producción:Poda de formación. Consiste en la eliminación de ramas o brazos para dejar un número determinado en las características de la plantación, como son el suelo, climatología, sistema de cultivo (invernadero o aire libre), marco de plantación y las características propias de la planta con la que se trate. Su finalidad es obtener una mejor distribución y cantidad de nutrientes en las ramas definitivas, consiguiendo un mejor y rápido crecimiento, como acelerar su desarrollo natural.Poda de fructificación. Consiste en la eliminación de brotes enfermos, mal situados, frutos, hojas, etc., con la finalidad de aumentar considerablemente la producción de frutos en la planta, gracias a un equilibrio vegetativo y reproductivo.
2 Según los órganos eliminados de las plantas se consideran varios estilos de poda:Poda de hojas. El deshojado o poda de hojas consiste en la búsqueda del equilibrio vegetativo y reproductivo de la planta, ya que un exceso de hojas ocasiona una competencia nutricional con respecto a los frutos. Hay que eliminar las hojas en la cantidad justa para no ocasionar una insuficiente actividad fotosintética, conllevando a un menor crecimiento y fructificación, además de posibles quemaduras por el sol, por ausencia de sombreado, en ciertos frutos sensibles. El deshojado, a su vez, permite eliminar hojas envejecidas, con presencia de síntomas de plagas o enfermedades, además de conseguir una mejor ventilación e iluminación de la planta.Poda de flores. No es una práctica usual en horticultura ecológica la eliminación o aclareo de flores en planta, salvo en algunas especies en las que se quiera reducir el futuro número de frutos y así conseguir un mejor crecimiento de los mismos, o en el caso de especies de floración mixta, para evitar la polinización y, con ello, la obtención de frutos de baja calidad comercial.Poda de frutos. El aclareo o poda de frutos permite equilibrar, según el desarrollo vegetativo de la planta, el número de frutos óptimo para que alcancen un buen tamaño comercial. Este aclareo permite eliminar frutos deformes, afectados por plagas y/o enfermedades, mal posicionados en la planta, etc.Poda de yemas y brotes terminales. Este tipo de poda, conocida como pinzado, consiste en la eliminación de yemas y brotes terminales, consiguiendo un efecto de evolución y desarrollo sobre las otras yemas y brotes presentes en la planta, favoreciendo así su crecimiento y un desarrollo rápido en la aparición de yemas de flor en la planta, al desaparecer la dominancia que producen los brotes terminales.Poda de tallos. Consiste en la eliminación completa de tallos o ramas para conseguir un mejor desarrollo longitudinal y de grosor, del tallo o tallos que se dejan en la plantan tras la poda.
Aplicación práctica
Carmen, que es nueva en esto de la horticultura, le pregunta a su vecino, otro hortelano, por qué era importante realizar pinzamientos en la rama principal en cada planta de melón, y en los brotes que irán creciendo sucesivamente, y qué relación tiene esta poda con el adelanto de la cosecha. Argumente su respuesta.
SOLUCIÓN
Al realizar el pinzamiento de la rama principal, se origina la brotación lateral de nuevas ramas o ramas secundarias, que al ser nuevamente pinzadas, favorece y adelanta la aparición de yemas de flor, por lo que, si todo evoluciona correctamente, estas se transformarán en frutos, consiguiendo un adelanto en la recolección, respecto a aquellas plantas que no se les practica este tipo de poda.
Poda de especies frutícolas
La poda de especies frutícolas arbóreas tiene el objetivo de modificar el crecimiento natural que poseen los árboles. De no realizarse labores de poda en la fruticultura ecológica, los árboles presentarían un entrecruzamiento de ramas, de escaso grosor y por tanto débiles, que impediría la ventilación e iluminación por exceso de follaje, con producciones de fruta de escaso valor comercial y, otra característica importante, la vecería o alternancia de producción, que consiste en producciones abundantes de poco calibre un año y en la siguiente campaña poca o nada de fruta, y así sucesivamente.
Por todo esto, la poda frutícola tiene la finalidad de modificar dicho crecimiento vegetativo natural, favoreciendo o restringiendo el desarrollo de sus ramas, dándoles una forma o estructura intencionadamente, para así obtener la máxima productividad posible.
Los tipos de poda en fruticultura se pueden clasificar en función del objetivo a conseguir, del tipo de corte que se practique y de la época del año en la que se ejecute:
1 En función del objetivo que se quiere conseguir de la planta:Poda de formación. Consiste, a lo largo de los 3-4 primeros años de plantación, en la eliminación o poda de ramas y brotes seleccionados, para obtener una forma o esqueleto determinado en el árbol. Los cinco estilos de poda de formación más extendidos en la actualidad son en vaso (francés, regular o libre), palmeta (regular o irregular), pirámide (regular o irregular), eje central y cordón (vertical, inclinado u horizontal). La poda de formación es de obligada práctica en la fruticultura ecológica para alcanzar los siguientes beneficios:Crear una estructura sólida que soporte el peso de la cosecha y los envites del viento.Que la estructura del árbol favorezca la fructificación, y la exposición de los mismos a una correcta iluminación y ventilación.Ajustar el marco de plantación sin que los árboles se molesten entre sí.Según el modelo de poda de formación empleada, puede reducirse considerablemente el marco de plantación, con el consiguiente aumento del número de árboles por superficie.Facilitar el paso de maquinaria durante la realización de las labores propias de los cultivos frutales.Poda de limpieza. Consiste en la eliminación de todas aquellas ramas improductivas y no deseadas que alteran la estructura de formación conseguida, para restringir la envergadura y el crecimiento en altura de los árboles, así como rebrotes de raíz, ramas enfermas, dañadas, secas, etc. La poda de limpieza se realiza según la especie que se trate y el vigor de la plantación, ejecutándose con carácter anual en algunos casos o cada 2-3 años generalmente.Poda de fructificación. Esta poda consiste en la renovación de las estructuras que dan fruta, eliminando aquellas ramas que llevaron la fruta y están agotadas, para dejar otras nuevas, que son las que producirán fruta en las próximas campañas. Aquellas ramas que se reconoce que nunca darán fruta se eliminan del árbol lo más pronto posible en la poda de limpieza. La poda de fructificación se practica una vez el árbol está formado y se realiza todos los años que dure la plantación. Es necesario obtener una especialización profesional para practicarla, para conocer cómo se diferencian las técnicas de poda entre las distintas especies de frutales, porque cada frutal tiene unas características especiales, en cuanto a la poda y dónde o de qué ramos se obtiene producción de fruta. En la siguiente tabla se muestra cuáles son las principales ramas o estructuras de las que se obtiene fruta en las principales especies frutales. Ramas que portan fruta en los principales frutalesManzanoLamburdas, brindillas, ramas mixtas de un añoPeralLamburdas, brindillas, ramas mixtas de un añoMembrilloBrindillas, ramas mixtas de un añoNíspero japonésExtremidades de las ramas de un añoMelocotoneroRamas mixtas, brindillas, dardos en ramilleteCirueloDardos en ramillete, ramas mixtasAlmendroRamas mixtas, dardos en ramilleteCerezo dulceDardos en ramillete, ramas mixtasCerezo ácidoRamas mixtas, dardos en ramilleteAlbaricoqueroDardos en ramillete, ramas mixtasAgriosRamas mixtas de un año, dardos, brindillasNogalRamas del añoAvellanoRamas de un año, dardos, brindillasCastañoRamas del añoHigueraRamas de un año, ramas del añoCaquiRamas del añoKiwiRamas de añoPoda de rejuvenecimiento. Esta poda consiste en la eliminación, casi en su totalidad, de la copa del árbol, para que con ello se renueve completamente mediante la emisión de ramos nuevos. Este tipo de poda se explicará detalladamente más adelante.
2 En función del tipo de corte que se practica:Poda de aclareo. Consiste en la eliminación de aquellas ramas no deseadas, desde su punto de inserción, dejando aquellas que interesan. Esto provoca un crecimiento en longitud de los ramos que se dejan. Estos ramos seleccionados tendrán que ser renovados en los próximos años, eliminándolos por aclareo para reemplazarlos por otros nuevos.Poda por despunte. Consiste en eliminar parte de la longitud total de un ramo. Se conoce como poda larga o en varas si se deja una porción de ramo que posea cinco yemas, y poda corta o en pulgares si la porción dispone menos de cinco yemas.
3 En función de la época del año en la que se practica la labor de poda, la cual depende en gran medida de la especie frutal con la que se trate:Poda seca o de invierno. Se conoce así a la poda que se practica en aquellos árboles con parada o reposo invernal, en los que disminuye considerablemente la circulación de savia, de ahí, lo de seca. A su vez, se clasifica en poda seca temprana (desde la caída de la hoja hasta diciembre), poda de invierno (desde diciembre hasta enero) y poda seca tardía (finales de invierno hasta la apertura de las yemas). La poda de invierno se emplea para una poda de formación más intensa o de rejuvenecimiento, aprovechando el reposo de los árboles.Poda en verde o de verano. Se le llama porque la planta está en plena actividad vegetativa y la finalidad principal que se persigue es limpiar de estructuras no deseadas, contener el crecimiento de ramas, limitar al árbol en altura y equilibrarlo en su relación vegetativa y productiva. En el verano se produce una parada o reposo estival en los árboles frutales, muy similar a la de invierno, durante la cual la poda en verde puede ser más intensa. También se clasifica en poda verde de primavera (desde la apertura de yemas hasta junio), poda verde de verano (desde julio a agosto, durante el reposo de verano) y poda verde tardía o de otoño (desde septiembre hasta el mes de octubre).
Actividades
7. Defina brevemente en qué consiste la poda de formación, la poda de fructificación y la poda de limpieza.
8. Elija una especie hortícola y otra frutal a la que se le practique la labor de poda, y defina de cada una de ellas qué tipo de poda es y cuándo se realiza.
Aplicación práctica
Cristóbal quiere dedicar su finca de 10 ha a la producción de la manzana ecológica, y le consulta a un técnico cuántos árboles necesita por hectárea, para poder realizar la consulta de presupuesto a un vivero certificado en plantel ecológico. Este le responde que oscila entre los 150 y los 3.000 árboles por hectárea.
¿A qué factor se debe tanta oscilación en el marco de plantación de la manzana?
SOLUCIÓN
Se debe al estilo de poda de formación que se va a emplear, entre las cuales, en las de tipo vaso o libre, el árbol precisa de mayor distancia entre árboles y entre filas, mientras que la poda en palmeta y cordón, por ejemplo, permite el acercamiento entre árboles y la reducción entre calles, aumentando considerablemente la densidad de plantación. Por ello, Cristóbal deberá elegir cuál será el sistema de formación elegido para poder saber qué cantidad de árboles va a precisar.