Kitabı oku: «El ejército y las partidas carlistas en Valencia y Aragón (1833-1840)», sayfa 3
C) EL EJÉRCITO Y LAS PARTIDAS CARLISTAS
Antes de empezar a profundizar en el tema, se hace necesario aclarar algunos términos, especialmente los que aparecen en el título de este libro. ¿Qué es exactamente un ejército? ¿En qué se diferencia de una partida? ¿Se puede considerar un ejército a las fuerzas de Cabrera? La historiografía no ha entrado mucho en las dos primeras cuestiones, pero sí que hay un consenso en que llegó a haber un ejército carlista en Valencia y Aragón. Esto ya lo defendieron los primeros que escribieron libros sobre la guerra carlista, en la década de 1840, independientemente de su ideología política. De esta manera, los autores de Panorama español sostenían que las antiguas “hordas” de Aragón y Valencia se habían convertido, en 1836, en las divisiones del “ejército” de Cabrera.65 En el mismo sentido, aunque situando después este proceso, se posicionaba Wilhelm von Rahden, quien afirmaba que, tras la toma de Morella (en enero de 1838), Cabrera pasó de ser un caudillo guerrillero a convertirse en el jefe de un ejército.66 Lo mismo decía Dámaso Calbo y Rochina, cuando escribía que en enero de 1838 el “ejército” de Cabrera constaba de 19 batallones y 9 escuadrones.67 Posteriormente otros autores, como Boix, Pirala, Flavio y Romano, ratificaron este punto de vista.68
Más sistemático fue Melchor Ferrer, quien afirmaba que llegó a haber tres ejércitos carlistas en España: el del Norte, el de Cataluña y el de Valencia y Aragón.69 En el mismo sentido se pronunció, a principios de los años 90, Alfonso Bullón de Mendoza.70 Y últimamente esa ha seguido siendo la interpretación que ha dado la historiografía. Antonio Manuel Moral y Carlos Canales, por ejemplo, continúan defendiendo la existencia de los mismos tres ejércitos que mencionaba Ferrer.71 También Pedro Rújula clasifica así a las tropas de Cabrera, al afirmar que sus medidas organizativas le dieron la estructura y la apariencia de un ejército.72 Y lo mismo sostienen Núria Sauch y Javier Urcelay, procedentes de campos muy diferentes, pero que han escrito sus obras hace relativamente poco tiempo.73 Además, no parece que esto sea un tema de discusión, puesto que no he encontrado a ningún autor que defienda la postura opuesta.
¿Pero qué es realmente un ejército? ¿Cuándo se deja de ser un grupo guerrillero para convertirse en una fuerza regular? Bajo mi punto de vista habría cuatro requisitos que se deberían cumplir para poder catalogar como “ejército” a un grupo armado. El primero de ellos sería el disponer de una organización militar, a base de divisiones, batallones y compañías, que a su vez deberían estar dirigidas por una serie de jefes organizados jerárquicamente (brigadieres, coroneles, comandantes...). El segundo sería disponer de un número significativo de tropas uniformadas, a fin de dar una apariencia externa de que se está ante un ejército organizado. El tercero contar con armamento pesado (es decir, artillería), lo que permitiría conquistar las plazas fuertes del adversario. Y por último disponer de puntos fortificados, a salvo de ataques enemigos, y en los que podría desarrollarse una cierta infraestructura de retaguardia. Así pues, si se dan las cuatro condiciones estaríamos ante un ejército. Si no se cumple ninguna (o sólo una) nos encontraríamos con un grupo guerrillero. Y si se dan dos o tres estaríamos ante una fuerza de transición, en vías de convertirse en un ejército regular.
Ahora lo que cabe preguntarse es si las fuerzas carlistas de Valencia y Aragón cumplían estas condiciones. Pues bien, cuando empezó la guerra en el Maestrazgo se intentó crear algo parecido a un ejército organizado, utilizando para ello la plaza fuerte de Morella y la organización militar de los voluntarios realistas. No obstante, al poco tiempo se perdió la única fortaleza de que disponían, a lo que siguió el desastre de Calanda y el fusilamiento del barón de Hervés, con lo que el carlismo valenciano-aragonés quedó reducido, durante mucho tiempo, a unos cuantos grupos de guerrilleros. Así siguieron las cosas hasta que en marzo de 1835 Cabrera sustituyó a Carnicer al mando de la comandancia general de Aragón. Entonces el nuevo caudillo hizo valer su fuerte personalidad para unificar las principales partidas y diseñar una incipiente organización. Tres meses más tarde creó las primeras divisiones, que se dividieron en batallones y compañías, empezando así a dar un aspecto más militar a su fuerza.
Al año siguiente continuó este proceso, al fortificarse Cantavieja, que durante varios meses se convirtió en la única plaza fuerte del carlismo valenciano-aragonés. No obstante, los rebeldes sufrieron un importante revés en octubre, cuando el general San Miguel la reconquistó, privando a los carlistas de su principal base de operaciones. Y aunque había algunos reductos rebeldes en los puertos de Beceite, estos también fueron destruidos por las tropas de la reina, aprovechando la ausencia de Cabrera, que se había incorporado a la expedición de Gómez.
Pero en cuanto volvió el caudillo catalán, las cosas empezaron a mejorar para los carlistas valenciano-aragoneses. En 1837 se generalizó el uso de la boina y se empezó a uniformar a algunas unidades. Además, en abril se recuperó Cantavieja, lo que permitió a los rebeldes empezar a contar con una importante cantidad de piezas de artillería, que habían sido capturadas allí. Al mismo tiempo, la nueva plaza fuerte volvió a ser un punto seguro para las fuerzas de Cabrera, siendo utilizada para acoger una fábrica de cañones, un depósito de prisioneros, un hospital militar, la redacción de un periódico y otras muchas instalaciones. Algo parecido se hizo en Mirambel (Teruel), donde se situaron las oficinas de la junta carlista. Todo esto se vio reforzado durante 1838, con la toma de la Morella y la construcción de gran cantidad de fortificaciones, que estaban guarnecidas por varios miles de soldados rebeldes.
Por otra parte, en julio de 1837 el caudillo catalán prosiguió su tarea centralizadora, eliminando al Serrador, único dirigente importante que no le obedecía, y haciéndose así con el control del carlismo valenciano. Lo mismo hizo con la administración rebelde, imponiendo su autoridad sobre la junta nombrada por el pretendiente, que acabó convirtiéndose en una corporación totalmente controlada por él. Toda esta centralización, que no tuvieron, por ejemplo, los carlistas catalanes, permitió a Cabrera crear un pequeño estado en las montañas del este de España, hasta que el convenio de Vergara marcó el inicio de su fin, en agosto de 1839. Por todo ello, considero que los carlistas de Valencia y Aragón sí que llegaron a crear un auténtico ejército, aunque no desde el principio de la guerra. De esta manera, se pasaría de unas fuerzas de transición (1833), a unas partidas guerrilleras (1833-1836), para volver después a unas fuerzas de transición (1836-1838), que acabarían convirtiéndose en un ejército regular (1838-1840).
Pero la existencia de un ejército organizado no hizo desaparecer a muchas partidas carlistas, que siguieron actuando por su cuenta durante toda la contienda. No obstante, una vez el caudillo catalán se hizo con el control de la situación, los grupos más importantes se integraron en su ejército y sólo permanecieron independientes las pequeñas gavillas, formadas por menos de cien combatientes. Estos grupos no tenían ya ninguna influencia en el desenlace de la guerra, pero afectaban mucho a la vida cotidiana de la población, ya que se dedicaban al pillaje y a las venganzas personales, combatiendo a las tropas de la reina sólo cuando no les quedaba más remedio. Por eso el carlismo real de estas pequeñas fuerzas es bastante discutible, ya que no podían hacer gran cosa contra el ejército isabelino y sí, en cambio, que sus integrantes pudiesen sacar algún provecho de la guerra.
Una vez dicho esto, corresponde pasar al análisis pormenorizado del ejército y las partidas carlistas, que empezaré con la organización militar, para pasar después a los aspectos logísticos y terminar con el funcionamiento de la retaguardia rebelde. Todo este recorrido nos permitirá entender por qué los carlistas llegaron a ser un enemigo tan importante para el gobierno liberal, máxime cuando partían de una posición tan poco favorable.
1 Sobre las reformas liberales véase Artola, M., Antiguo régimen y revolución liberal, Barcelona, Ariel, 1978, Aróstegui, J., “El carlismo y la guerra civil” y Tomás y Valiente, F., “La obra legislativa y el desmantelamiento del antiguo régimen” en J. M. Jover (dir), Historia de España. La era isabelina y el Sexenio Democrático (1834-1874), Madrid, Espasa Calpe, 1996. Sobre las diversas interpretaciones del carlismo véase Solé, J. M. (dir.), El carlisme com a conflicte, Barcelona, Columna edicions, 1993 y Canal, J., El carlismo. Dos siglos de contrarrevolución en España, Madrid, Alianza Editorial, 2000.
2 Milicia absolutista creada en 1823 por Fernando VII para combatir el liberalismo. Fue disuelta en 1833 al decantarse cada vez más hacia el carlismo.
3 Anónimo, Fastos españoles o efemérides de la guerra civil, Madrid, Imprenta de don Ignacio Boix, 1839-1840, v. 1, pp. 266, 770 y 790 y v. 2, pp. 23, 26, 79, 83, 111, 128, 151-153 y 358. Segura, J., Morella y sus aldeas, Villarreal, Ayuntamiento de Morella, 1991, v. 4, pp. 24-36.
4 Anónimo, Fastos españoles... v. 2, pp. 272-400. Segura, J., Morella... v. 4, pp. 42-47.
5 Córdoba, B., Vida militar y política de Cabrera, Madrid, Imprenta de Eusebio Aguado, 1844-1846, v. 1, pp. 47-95. Boletín Oficial de la Provincia de Castellón de la Plana, 1 de diciembre de 1834.
6 El Turia, 26 de octubre, 3 y 24 de diciembre de 1834. Segura, J., Morella... v. 4, pp. 69 y 70. Córdoba, B., Vida militar... v. 1, pp. 77, 92 y 94.
7 Córdoba, B., Vida militar... v. 1, pp. 99-127 y 138-140.
8 Córdoba, B., Vida militar... v. 1, pp. 130-164. Un emigrado del Maestrazgo, Vida y hechos de los principales cabecillas facciosos de las provincias de Aragón y Valencia desde el pronunciamiento de Morella en 1833 hasta el presente, Valencia, Oficina de López, 1840, p. 111.
9 Pirala, A., Historia de la guerra civil y de los partidos liberal y carlista, Madrid, Turner / Historia 16, 1984, v, 2, p. 58. Una reunión de amigos colaboradores, Panorama español. Crónica contemporánea, Madrid, Imprenta de panorama español, 1842-1845, v. 3, pp. 48 y 49. Calbo y Rochina, D., Historia de Cabrera y guerra civil en Aragón, Valencia y Murcia, 1845, pp. 83 y 84. Segura, J., Morella... v. 4, pp. 86-92.
10 Fernández de San Román, E., marqués de San Román, Guerra civil de 1833 a 1840 en Aragón y Valencia. Campañas del general Oraa (1837-1838), Madrid, Imprenta y fundición de M. Tello, 1884, v. 1, p. 20.
11 Córdoba, B., Vida militar... v. 1, pp. 180-203. Calbo y Rochina, D., Historia de Cabrera... p. 195. Un emigrado del Maestrazgo, Vida y hechos de los principales... pp. 19 y 20. Segura, J., Morella... v. 4, pp. 103 y 104.
12 San Miguel, E., De la guerra civil de España, manuscrito conservado en la Biblioteca Nacional, 1836, pp. 61, 68 y 69. Calbo y Rochina, D., Historia de Cabrera... pp. 2 y 3. Fontana, J., La crisis del antiguo régimen. 1808-1833, Barcelona, Crítica, 1988, pp. 280-282. Caridad, A., El carlismo en el País Valenciano y Teruel (1833-1840), Valencia, Universidad de Valencia, 2010, p. 828.
13 Córdoba, B., Vida militar... v. 1, pp. 176, 214-221, 227-246 y 257. Diario de Zaragoza, 25 de noviembre y 15 de diciembre de 1835. Diario Constitucional de Zaragoza, 14 de enero de 1837.
14 Córdoba, B., Vida militar... v. 1, pp. 256-261 y 270-333.
15 Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 15-26. Fernández de San Román, E., marqués de San Román, Guerra civil... v. 1, p. 22.
16 Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 28-31.
17 Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 45-50. Calbo y Rochina, D., Historia de Cabrera... pp. 146-148. Segura, J., Morella... v. 4, pp. 123 y 124. Diario Mercantil de Valencia, 30 de junio de 1836. Monfort, A., Historia de la real villa de Villafranca del Cid, Valencia, Ayuntamiento de Villafranca del Cid, 1999, pp. 567, 568 y 581.
18 Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 39-41. Calbo y Rochina, D., Historia de Cabrera... pp. 192 y 193. Un emigrado del Maestrazgo, Vida y hechos de los principales... pp. 201 y 202.
19 Pirala, A., Historia de la guerra... v. 3, pp. 70-74. Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 31-33.
20 Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 27, 44, 53-57, 67, 68 y 84-89. Diario Mercantil de Valencia, 24 de julio de 1836. Diario de Avisos de la Ciudad de Valencia, 20 de septiembre de 1836.
21 Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 89-139. Pirala, A., Historia de la guerra... v. 3, p. 147.
22 Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 142-145, 149 y 153.
23 Boletín Oficial de la Provincia de Castellón de la Plana, 13 de diciembre de 1836. Un emigrado del Maestrazgo, Vida y hechos de los principales... p. 21. Segura, J., Morella... v. 4, pp. 146 y 147.
24 Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 156-159. Calbo y Rochina. D, Historia de Cabrera... p. 247.
25 Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 169-189, 192 y 194-203.
26 Pirala, A., Historia de la guerra... v. 4, pp. 379 y 390-394. Diario Mercantil de Valencia, 14 de marzo de 1837.
27 Archivo Histórico de Orihuela, legajo D 1144. Calbo y Rochina, D., Historia de Cabrera... pp. 270-277.
28 Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 211-213, 217-220, 222 y 321-323. Archivo General Militar de Segovia, primera sección, legajo C-91.
29 Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 191, 192, 206, 207 y 222. Un emigrado del Maestrazgo, Vida y hechos de los principales... pp. 16-18, 21 y 22. Diario Mercantil de Valencia, 18 de mayo de 1837.
30 Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 231-237, 247-257 y 260-277. Fernández de San Román, E., marqués de San Román, Guerra civil... v. 1, pp. 136-142 y Diario Mercantil de Valencia, 12 de julio de 1837.
31 Córdoba, B., Vida militar... v. 3, pp. 3-33.
32 Córdoba, B., Vida militar... v. 3, pp. 33-59.
33 Córdoba, B., Vida militar... v. 3, pp. 72-80 y 83-84. Fernández de San Román, E., marqués de San Román, Guerra civil... v. 1, pp. 264 y 298-309.
34 Córdoba, B., Vida militar... v. 3, pp. 89-90, 94 y 99-100. Archivo de la Diputación Provincial de Zaragoza, vigilancia, caja XV-1026, legajos 140 y sin catalogar.
35 Córdoba, B., Vida militar... v. 3, pp. 118-129, 138-154, 236, 272, 273 y 546. Pirala, A., Historia de la guerra... v. 5, pp. 92 y 287. Diario Mercantil de Valencia, 22 de junio de 1838.
36 Un emigrado del Maestrazgo, Vida y hechos de los principales... pp. 161-170. Córdoba, B., Vida militar... v 3, pp. 106-112.
37 Córdoba, B., Vida militar... v. 3, pp. 158-172 y 176-179.
38 Córdoba, B., Vida militar... v. 3, pp. 189-197, 225-227 y 229-231. Diario Mercantil de Valencia, 3 de junio de 1838.
39 Fernández de San Román, E., marqués de San Román, Guerra civil... v. 2, pp. 109-119. Córdoba, B., Vida militar... v. 3, pp. 252, 261, 269 y 292-293. Un emigrado del Maestrazgo, Vida y hechos de los principales... p. 166.
40 Córdoba, B., Vida militar... v. 3, pp. 270-373.
41 Córdoba, B., Vida militar... v. 2, pp. 41 y 197 y v. 3, pp. 382, 389-394, 417, 426, 428-438, 450-463, 466-478 y 483-506. Cabello, F., Santa Cruz, F. y Temprado, R. M., Historia de la guerra última en Aragón y Valencia, Zaragoza, Institución Fernando el Católico y Diputación de Zaragoza, 2006, pp. 220 y 232. Pirala, A., Historia de la guerra... v. 5, p. 142. Diario Mercantil de Valencia, 16 de abril de 1839.
42 Córdoba, B., Vida militar... v. 3, pp. 478-481 y v. 4, pp. 3-7, 25, 26 y 491. Von Rahden, W., Cabrera. Erinnerungen aus dem spanischen Bürgerkriege, Frankfurt, Wilmans., 1840, pp. 304-307.
43 Diario Mercantil de Valencia, 17 de abril de 1839. Pirala, A., Historia de la guerra... v. 5, p. 300.
44 Von Rahden, W., Cabrera. Erinnerungen... pp. 326, 327 y 405. Pirala, A., Historia de la guerra... v. 5, pp. 308 y 309.
45 Córdoba, B., Vida militar... v. 4, pp. 72-82, 85-93, 106-114, 118-122 y 478-481. Von Rahden, W., Cabrera. Erinnerungen... pp. 429-455, 465, 466, 480-482 y 489. Von Goeben, A., Cuatro años en España. Los carlistas, su levantamiento, su lucha y su ocaso. Esbozos y recuerdos de la guerra civil, Pamplona, Institución Príncipe de Viana y Diputación Foral de Navarra, 1966, pp. 310-312. Diario Mercantil de Valencia, 1 de junio de 1839.
46 Von Rahden, W., Cabrera. Erinnerungen... pp. 497-501. Córdoba, B., Vida militar... v. 4, pp. 137-139.
47 Córdoba, B., Vida militar... v. 4, pp. 82, 119, 147-149, 167 y 183. Von Rahden, W., Cabrera. Erinnerungen... p. 511. Cabello, F., Santa Cruz, F. y Temprado, R. M., Historia de la guerra... p. 255. Archivo del Reino de Valencia, propiedades antiguas, legajos 196, 229, 250, 407, 471, 572, 592, 615, 659 y 728. Diario Mercantil de Valencia, 30 de octubre de 1839.
48 Córdoba, B., Vida militar... v. 4, pp. 187-207, 215-217, 221, 222, 228-230 y 320-322. Pirala, A., Historia de la guerra... v. 5, p. 566.
49 Córdoba, B., Vida militar... v. 4, pp. 240, 241, 271, 272, 287, 300, 317, 327 y 340. Diario Mercantil de Valencia, 23 de marzo, 22 de abril, 23 de mayo y 10 de junio de 1840.
50 Córdoba, B., Vida militar... v. 4, pp. 323-325, 335-339, 343-359, 366-367 y 370-378. Calbo y Rochina, D., Historia de Cabrera... pp. 526-543 y 572.
51 Archivo de la Diputación Provincial de Castellón de la Plana, colección de actas de 1838, folios 39 y 149. Diario de Valencia, 22 de febrero de 1834. Boletín Oficial de Valencia, 14 de marzo de 1834, 20 de enero, 27 de octubre, 3 de noviembre de 1835, 5 de diciembre de 1837 y 12 de enero de 1838. Diario Mercantil de Valencia, 14 de noviembre de 1835. Boletín Oficial de la Provincia de Castellón de la Plana, 27 de noviembre y 1 de diciembre de 1835.
52 Boletín Oficial de Valencia, del 25 de abril de 1837 al 26 de abril de 1840. Diario Mercantil de Valencia, 31 de marzo de 1838 y 19 de junio de 1839. Bullón de Mendoza, A., La primera guerra carlista, Madrid, Universidad Complutense, 1992, p. 167.
53 Archivo de la Diputación Provincial de Castellón de la Plana, colección de actas de 1836-1837, p. 377. Pirala, A., Historia de la guerra... v. 4, p. 379. Bullón de Mendoza, A., La primera guerra... p. 149.
54 El Turia, 26 de enero, 12 y 22 de febrero de 1834. Diario Mercantil de Valencia, 27 de agosto de 1835. Boletín Oficial de Valencia, 25 de diciembre de 1835, 19 de mayo y 5 de diciembre de 1837. Duncan, F., The english in Spain, Londres, John Murray, 1877, pp. 333-336. Chust, M., Ciudadanos en armas. La milicia nacional en el País Valenciano (1834-1840), Valencia, Institución Alfonso el Magnánimo, 1987, pp. 28, 34, 53, 59, 60, 66, 72 y 87-89.
55 Boletín Oficial de Valencia, 15 de septiembre de 1835 y 7 de mayo de 1839. Diario Mercantil de Valencia, 5 de septiembre de 1835, 31 de diciembre de 1838, 25 de noviembre de 1839 y 16 de enero de 1840. Archivo de la Diputación Provincial de Castellón de la Plana, colección de actas de 1839, folios 64 y 238. Bullón de Mendoza, A., La primera guerra... p. 189.
56 Córdoba, B., Vida militar... v. 3, p. 261. Bullón de Mendoza, A., La primera guerra... pp. 178, 179, 189 y 198. Canales, C., La primera guerra carlista 1833-1840. Uniformes, armas y banderas, Madrid, Ristre, 2006, pp. 33 y 39.
57 Córdoba, B., Vida militar... v. 1, pp. 186, 189 y 190 y v. 2, p. 61. Cabello, F., Santa Cruz, F. y Temprado, R. M., Historia de la guerra... pp. 120 y 205. Pirala, A., Historia de la guerra... v. 3, p. 140.
58 Archivo de la Diputación Provincial de Valencia, B-4, quintas, milicias provinciales, cajas 5, 6, 7, 8, 9, 10 y 11. Boletín Oficial de la Provincia de Castellón de la Plana, 15 y 17 de enero de 1836. Diario Mercantil de Valencia, 3-8 de noviembre de 1837, 25, 26 y 30 de agosto de 1838. Córdoba, B., Vida militar... v. 3, pp. 478-480. Cabello, F., Santa Cruz, F. y Temprado, R. M., Historia de la guerra...pp. 136 y 205. Boletín Oficial de Valencia, 19 de mayo de 1837. Chust, M., Ciudadanos en armas...pp. 37, 38, 43-45, 74-76 y 103.
59 Archivo Municipal de Culla, caja 134, legajo 2. Archivo Municipal de Castellfort, caja 93. Archivo de la Diputación Provincial de Castellón de la Plana, colección de actas de 1836-1837, pp. 698 y 88 bis. Diario Mercantil de Valencia, 11 y 16 de marzo de 1838, 20 de enero de 1839. Diario Constitucional de Zaragoza, 4 de enero y 13 de febrero de 1840. Pirala, A., Historia de la guerra... v. 4, p. 407 y v. 5, pp. 46 y 47.
60 Archivo de la Diputación Provincial de Castellón de la Plana, colección de actas de 1836-1837, pp. 237, 238, 309, 375, 377, 388, 445, 507, 508 y 251 bis. Diario Mercantil de Valencia, 21 de febrero, 11 y 15 de marzo de 1838. Cabello, F., Santa Cruz, F. y Temprado, R. M., Historia de la guerra... p. 118. Fernández de San Román, E., marqués de San Román, Guerra civil... v. 1, pp. 186, 191-194 y 358-366.
61 Archivo de la Diputación Provincial de Castellón de la Plana, colección de actas de 1836-1837, p. 91 bis y colección de actas de 1839, folio 74. Córdoba, B., Vida militar... v. 3, pp. 375-377. Diario Mercantil de Valencia, 2, 13, 15, 16 y 19 de febrero de 1839.
62 Archivo de la Diputación Provincial de Valencia, B-4, quintas, milicias provinciales, cajas 5, 6, 7, 8, 9, 10 y 11. Archivo de la Diputación Provincial de Castellón de la Plana, colección de actas de 1839, folio 13. Diario Mercantil de Valencia, del 4 de abril al 11 de julio de 1836. Pirala, A., Historia de la guerra... v. 3, p. 131 y v. 5, p. 309. Chust, M., Ciudadanos en armas... pp. 43, 44 y 52. Bullón de Mendoza, A., La primera guerra... pp. 186 y 187.
63 Diario Mercantil de Valencia, 18 de agosto de 1839. Córdoba, B., Vida militar... v. 1, p. 262. Cabello, F., Santa Cruz, F. y Temprado, R. M., Historia de la guerra... pp. 142 y 143.
64 Archivo de la Diputación Provincial de Valencia, A. Central 8, cárceles y correcciones públicas 1, expedientes generales, cajas 5 y 7. Córdoba, B., Vida militar... v. 3, pp. 429, 478, 484-486 y 496. Segura, J., Morella... v. 4, p. 87.
65 Una reunión de amigos colaboradores, Panorama español... v. 2, pp. 86 y 91.
66 Von Rahden, W., Cabrera. Erinnerungen aus dem spanischen Bürgerkriege, Frankfurt, Wilmans, 1840, p. 364.
67 Calbo y Rochina, D., Historia de Cabrera... p. 345.
68 Boix, V., Historia de la ciudad y reino de Valencia, Valencia, Imprenta de Benito Monfort, 1847, v. 3, p. 429. Pirala, A., Historia de la guerra... v. 5, p. 287. Flavio, E., conde de X***, Historia de Don Ramón Cabrera, Madrid, Establecimiento Tipográfico-Editorial de G. Estrada, 1870, v. 1, p. 469. Romano, J., Cabrera. El Tigre del Maestrazgo, Madrid, Imprenta de Juan Pueyo, 1936, p. 195.
69 Ferrer, M., Acedo, J. y Tejera, D., Historia del tradicionalismo... v. 18, p. 188.
70 Bullón de Mendoza, A., La primera guerra... p. 300.
71 Canales, C. y Carrasco, J. C., La primera guerra carlista 1833-1840. Uniformes, armas y banderas, Madrid, Medusa ediciones, 2000, p. 41. Moral, A. M., Las guerras carlistas, Madrid, Sílex, 2006, p. 53.
72 Rújula, P., Ramón Cabrera. La senda del Tigre, Zaragoza, Ibercaja, 1996, p. 57.
73 Urcelay, J., El Maestrazgo carlista, Vinaròs, Ediciones Antinea, 2002, p. 281. Sauch, N., Guerrillers i bàndols civils entre l’Ebre i el Maestrat: la formació d’un país carlista (1808-1844), Barcelona, Publicacions de l’abadia de Montserrat, 2004, p. 137.