Kitabı oku: «Desarrollo cognitivo, sensorial, motor y psicomotor en la infancia. SSC322_3», sayfa 2

Yazı tipi:

2.1. La observación como técnica

Mediante la observación, se pretende conocer de la forma más directa posible la realidad que se tiene delante. Lo que se persigue al observar es llegar a un mejor y mayor conocimiento del niño.

La observación es en sí un fenómeno espontáneo del ser humano. Desde el momento del nacimiento, en mayor o menor medida, el ser humano observa todo lo que sucede a su alrededor.

Lo que convierte a la observación en un instrumento útil y válido en el campo educativo son determinados factores, que deben asegurarse para que la conclusión a la que se llegue sea válida y fiable:

1 Que sirva a un propósito bien definido: en este caso, al estudio de algún o algunos aspectos relacionados con el desarrollo sensorio-motor y/o cognitivo en la infancia.

2 Que necesite de una sistemática planificación: no vale solo con observar por observar, hay que prepararla y tener en cuenta todos los elementos y factores que influyen en la observación.

3 Que esté sujeta a revisiones, comprobaciones, controles, etc.

Los elementos de la observación son:

1 El observador: en este caso, el observador es el educador, formador, monitor o cuidador de los niños. Debe ser una persona formada en el campo de la psicología evolutiva, así como familiarizada con las técnicas de observación y registro de datos. Su actitud debe permitirle estar alerta y atento ante todos los fenómenos que suceden, y que están directa o indirectamente relacionados con los hechos que quiere analizar.

2 El sujeto observado: el sujeto o sujetos observados son los niños y niñas, los educandos. Ellos son el objeto de nuestro análisis y estudio.

3 La situación observada: se refiere a las dimensiones espacio-temporales, es decir, el momento y lugar en que se produce la situación o acción objeto de estudio.


Recuerde

La observación es en sí un fenómeno espontáneo del ser humano.

Las características que debe tener una buena observación son:

1 Objetiva: se debe procurar ser lo más objetivo posible en la mirada de observación, así como en el registro de lo observado. Se deben dejar las posibles interpretaciones para una fase posterior.

2 Repetitiva: siempre que sea posible, se observará una misma situación, comportamiento o conducta en varias ocasiones, para minimizar al máximo la influencia de los factores externos que afectan al sujeto observado.

3 Múltiple: por las mismas razones que se pretende realizar la observación cambiando el marco espacio-temporal, también se debe contemplar la posibilidad de cambiar el observador, para intentar minimizar en este caso las posibles visiones subjetivas del educador.

4 Planificada: como ya decíamos anteriormente, y en concordancia con todas las características anteriores, la observación ha de estar previamente planificada, dejando al azar el menor número posible de variables.


Al observar vamos a encontrar la información necesaria para aprender a identificar las dificultades, preferencias y necesidades del niño y niña, de esta manera podremos ayudarle de una forma más adecuada.


Nota

Una buena observación ha de ser objetiva, repetitiva, múltiple y planificada. Y el observador/a debe poseer ciertas cualidades: paciencia, objetividad, etc.

La observación tiene muchas modalidades, pudiendo ser directa o indirecta:

1 En la observación directa, el observador se encuentra en contacto directo con el objeto de estudio. Está presente cuando los hechos están sucediendo. El observador, por tanto, forma parte de la acción, aunque debe pretender influir en ella lo menos posible. Esto no quiere decir que no pueda ser la persona que observa la dinamizadora de la acción. Es decir, la que proponga una serie de actividades concretas que van a provocar la situación concreta que se quiere observar. Pero, una vez provocada esta situación y desencadenada la acción del sujeto de estudio, no se debe influir sobre el discurrir de los acontecimientos.

2 En la observación indirecta, la persona que ha de observar no se encuentra presente o visible ante los ojos del niño o niños objeto de estudio. Para ello, es necesario que el observador permanezca fuera del campo de acción, observando desde un lugar que le permita no ser visto. También se puede realizar una grabación de los sucesos y, así, el observador estaría totalmente ausente, para más tarde estudiar lo recogido en la grabación. Esta grabación puede ser visual, sonora o una combinación de ambas. Podríamos contemplar incluso otra forma de observación indirecta en la que el observador se sirve de otra u otras personas, que sí están presentes durante el periodo de acción que se quiere observar, para tener un conocimiento de lo ocurrido.


Sabía que...

El método Montessori es un método científico basado, precisamente, en la observación. Fue ideado por la educadora y médico italiana María Montessori a finales del siglo XIX y principios del XX.

El método nació de la idea de ayudar al niño y niña a obtener un desarrollo integral para lograr un máximo grado en sus capacidades intelectuales, físicas y espirituales, trabajando sobre bases científicas en relación con su desarrollo físico y psíquico. María Montessori fundamentó su método en el trabajo del niño y en la colaboración adulto - niño. Así, la escuela no es «un lugar donde el maestro transmite conocimientos», sino «un lugar donde la inteligencia y la parte psíquica del niño se desarrollará a través de un trabajo libre con material didáctico especializado».


“La primera tarea de la educación es agitar la vida, pero déjala libre para que se desarrolle” (M. Montessori)


Aplicación práctica

En tu aula de cinco años te interesa tener un registro de cómo se relaciona socialmente un grupo de niños y niñas. ¿Cómo llevarías a cabo la observación de forma directa e indirecta?

SOLUCIÓN

Para una observación directa:

Se realizaría esta en distintos espacios: en el aula, el patio de recreo, el comedor, etc.

Además, se llevaría a cabo durante la realización de distintas actividades: individuales, grupales, plásticas, lúdicas, de tiempo libre, etc.

Podría pasarse algún test sociométrico.

Para una observación indirecta:

Se realizarían entrevistas con el tutor, con la familia y con otros profesionales que estén en contracto con el grupo-clase.

Se grabarían en soportes audiovisuales distintas situaciones del grupo, en distintos lugares y durante la realización de distintos tipos de actividades.

Dentro del estudio y análisis de las características de la infancia se pueden observar múltiples facetas, características y comportamientos. Los aspectos que engloban a todos ellos son:

1 Aspecto sensoriomotor: hace referencia a todos aquellos aspectos determinados con el crecimiento y la evolución física y corporal del individuo.

2 Aspecto cognitivo: tiene que ver con el desarrollo intelectual, que irrevocablemente influye de forma directa en el rendimiento escolar.

3 Aspecto socio-afectivo y emocional: hace referencia a la relación del niño con los demás y a su propio equilibrio personal.

Finalmente, deben tenerse en cuenta las variables que influyen en el proceso de observación. Se entiende por variables los factores endógenos y exógenos que influyen en el sujeto a observar:

1 El observador: inevitablemente este elemento de la investigación va a influir en mayor o menor medida con más o menos profundidad, tanto en el proceso como en el resultado. Esta influencia ha de ser lo más suave posible y, en todo caso, y como señalábamos anteriormente, con fines dinamizadores y de redirección de la situación. En este sentido, influye notablemente la formación del observador, su interés, su capacidad, su experiencia, etc.

2 El contexto: las características del contexto en el que se produzca la observación van a influir en la misma. Por contexto entendemos tanto los factores personales (la familia, el grupo de iguales, otros adultos en contacto con el niño, etc.) como espacio-temporales (las características propias del lugar y momento en que se realice la observación, que normalmente será el colegio y en horario escolar) y materiales (los recursos materiales que se encuentren en la escena de investigación y que van a interactuar con el niño).

3 El sujeto observado: en este caso, las características sensorio-motoras y cognitivas que puede presentar el sujeto. En este sentido, y antes o durante el proceso de investigación, el observador debe intentar conocer todas las características propias del sujeto que hayan recogido otros observadores o profesionales que con anterioridad hayan estado en contacto con el niño.


Recuerde

La observación es la mejor técnica que el educador tiene en la etapa de Educación Infantil para registrar y analizar cualquier aspecto del desarrollo del niño.

Para que esta técnica sea efectiva el evaluador ha de conocer su naturaleza, sus características, sus modalidades y los factores que influyen en ella.


2.2. Instrumentos de observación

Para que la observación cumpla realmente las características esenciales que anteriormente señalábamos, es necesario el uso de instrumentos de observación.

Entendemos por instrumentos a todos aquellos recursos que son útiles para sistematizar los datos observados. En este sentido, permiten controlar la información recogida sobre el fenómeno observado.

Hay dos tipos de instrumentos de registro:

1 Instrumentos de registro continuo: el observador permanece alerta constantemente, dispuesto a registrar una conducta que se considere importante en cualquier momento, lugar y circunstancia.

2 Instrumentos de registro discontinuo: el proceso de observación y registro está temporalizado y esquematizado en un espacio y actividad concreta. Pero, independientemente de eso, los registros discontinuos, aunque puntuales, pueden repetirse las veces que se considere oportuno.

A continuación, se expondrán algunos de los instrumentos que permitirán observar adecuadamente el momento de desarrollo sensorio-motor y cognitivo del niño.

2.3. Registros anecdotarios

También son conocidos como cuadernos de bitácora. Son registros que pretenden la recogida de los datos sobre la conducta de forma sistemática y no planificada. Describen de forma continua una situación, un suceso puntual o un acontecimiento que podría considerarse significativo para detectar u observar la conducta que queremos conocer en el niño.

Para registrar anécdotas de una forma correcta hay que tener en cuenta una serie de pasos:

1 Seleccionar al alumno objeto de estudio, o bien seleccionar una muestra variada del grupo de alumnos que queremos estudiar.

2 Durante un periodo de tiempo lo más amplio posible, se deben describir tantas conductas anecdóticas como se permita.

3 Debe tenerse preparado el material de registro adecuado. No se deben recoger las observaciones de forma desorganizada ni aislada, sino en un documento conjunto que permita no perder detalle.

4 El registro de las anécdotas debe comenzar por aquéllas que más se salen de “la normalidad” hasta ir reparando en aquellas anécdotas y acontecimientos casi imperceptibles.

5 Se debe pedir la colaboración de algún otro profesional, para incluir en la observación distintos puntos de vista. La visión de otra persona puede captar anécdotas distintas, o incluso registrar la misma desde otra perspectiva.

6 Se debe realizar el mismo registro en momentos diferentes y en situaciones distintas, para observar si cambia el patrón de conducta en función de las variables externas.

Lo más aconsejable es tener un cuaderno en el aula para tal fin, que usaremos cuando sucedan cosas que nos llamen especialmente la atención, por su peculiaridad o su infrecuencia. Estas anécdotas deben apuntarse en el cuaderno, recogiendo, además de la descripción de lo sucedido, la fecha y el nombre de los protagonistas.

Pasado un tiempo, puede analizarse si determinadas conductas poco usuales son recurrentes en determinados alumnos, o son realizadas por todos los alumnos ante un determinado acontecimiento o situación.


Nota

Los registros anecdotarios son registros que pretenden la recogida de los datos sobre la conducta de forma sistemática y no planificada, pero sí de forma diaria. Normalmente se recoje en un cuaderno de campo o diario de seguimiento del grupo.


Aplicación práctica

Te encuentras en un aula de tres años y observas que en el grupo de niños/as donde se encuentra Juan, ha habido una incidencia de conducta agresiva. Indica y explica qué instrumento de observación utilizarías para ver si esta conducta se repite y cómo lo utilizarías.

SOLUCIÓN

Utilizaría un registro anecdotario. El primer paso sería tener disponible un cuaderno anecdotario, en el que se apuntarán instantáneamente los episodios de conductas o situaciones agresivas que se produzcan en ese grupo concreto de alumnos.

Se registrará el nombre de los implicados, el lugar, la hora, la actividad que se estaba realizando y el argumento desencadenante de la situación de agresividad.

Pasado un tiempo, y registradas bastantes de estas conductas, se analizará si hay reiteración en alguno de los elementos de la conducta, si se repiten en varias ocasiones los sujetos, la tipología de la conducta, el lugar, la hora, el tipo de actividad en que surge, etc., llegando, así, al fondo de la cuestión y conociendo las variables que provocan esta situación. A partir de las conclusiones extraídas, puede diseñarse una planificación de la intervención educativa encaminada a tratar esta problemática planteada.

2.4. Registros descriptivos

Son otro tipo de instrumento complementario a los registros anecdotarios. Son diarios, sistematizados y planificados, pero que no registran conductas aisladas que llaman la atención del observador, sino que, con una periodicidad establecida, recogen la afluencia de un determinado aspecto.

El observador es el que ha de decidir previamente qué va a observar, en qué momento, en qué lugar, etc. Debe determinar todas las variables posibles y hacer que en cada observación sean coincidentes.


Aplicación práctica

¿Cómo registraría si la clase de 5 años, grupo B, del CEIP Luis Córdoba presenta conductas agresivas en la hora del recreo mediante la utilización de un registro descriptivo?

SOLUCIÓN

Mediante un registro descriptivo.

Debe realizarse un registro descriptivo cada día a la hora del recreo. No se apuntarán las conductas agresivas todos los días, en todo lugar y en todo momento. Este método está más sistematizado y es más descriptivo. Se hará a una hora concreta, con este grupo concreto, y durante una serie de días predeterminados.

2.5. Escalas de valoración

Las escalas son otro instrumento de observación muy utilizado en el ámbito de la educación.

Las escalas de valoración tienen un espectro amplio. No solo registran la existencia o ausencia concreta de algún comportamiento, sino que intentan definir el grado, frecuencia o intensidad del mismo con calificaciones cuantitativas o cualitativas. Cuantifican, por tanto, la conducta o comportamiento, además de registrarlo. Esta cuantificación puede atender a varios criterios: poco-suficiente-mucho, bajo-medio-alto, nunca-a veces-siempre, etc.


Ejemplo

Si queremos observar el desarrollo social de un niño respecto a su grupo de clase, podríamos cuantificar si en la hora de recreo juega con sus compañeros, y señalar si lo hace poco, a veces o mucho, o incluso cuantificar numéricamente en una escala esta conducta. Pueden ser numéricas, gráficas o descriptivas.

Inevitablemente, las escalas dejan un mayor lugar a la subjetividad, ya que se pide al observador que determine la cuantificación, y puede haber grandes discrepancias entre dos observadores y una misma observación.


Aplicación práctica

Imagínese que, como educador, pretende saber el nivel de aceptación social de un niño dentro del grupo. ¿Cómo lo registraría en una escala de valoración? Ejemplifíquelo con distintos tipos.

SOLUCIÓN

Podríamos diseñar una escala de valoración descriptiva, en la que tuviesen que seleccionarse las opciones nunca-a veces-mucho.

En caso de querer utilizar una escala numérica, pueden establecerse los valores del 1 al 5.

Para una escala gráfica, podría presentarse cada ítem en una barra con un número de casilleros a rellenar en función de la intensidad de la conducta.

Los ítems podrían ser, por ejemplo:

1 Sus trabajos son elegidos para exhibirlos en el pasillo.

2 Es el personaje protagonista del cuento que dramatizan.

3 Es invitado a los cumpleaños de sus compañeros.

4 Es elegido en la formación de grupos de trabajo.En este caso, las respuestas no son cerradas, y la perspectiva global nos ofrecerá la posibilidad de analizar la situación, teniendo en cuenta varios matices, para poder llegar a una conclusión sobre la integración real del alumno.

2.6. Listas de control

Las listas de control son las más concisas y objetivas, muestran si el niño presenta o no una determinada conducta o comportamiento. No atienden a matices, no dan lugar a percepciones. La respuesta es totalmente cerrada y dual. Se trata de averiguar si una conducta o comportamiento existe o no, sin más pretensiones.


Recuerde

Las escalas son diferentes de los anecdotarios, tanto en su naturaleza como en su forma, ya que las escalas son instrumentos que permiten la obtención de datos más objetivos.

Una serie de escalas bien aplicadas deben dar los mismos resultados independientemente del observador que las realice.


Aplicación práctica

Imagínese que tiene una alumna de 3 años, Natalia. ¿Cómo podría saber si ha superado satisfactoriamente el periodo de adaptación al colegio?

SOLUCIÓN

Podría elaborarse una lista de control con los siguientes ítems, por ejemplo:

1 Llora al entrar a clase.

2 Se desprende de los objetos traídos de casa.

3 Se mueve libremente por el espacio del aula.

4 Pregunta con frecuencia qué hora es.

La respuesta que requiere este instrumento es cerrada, solo debe quedar registrado si aparecen o no, si son correctas o incorrectas, si han sido logradas o no... No existen más opciones.

2.7. La entrevista

Hay muchas y variadas definiciones para el concepto de entrevista, pero una de las más conocidas y sencillas es la formulada por Bingham y Moore (1959), que la definían como “una conversación seria con un fin distinto del simple placer de la conversación”.

Otro autor, Sandín (1985), estableció una serie de características generales de las entrevistas:

1 Comunicación verbal: que se establece entre dos o más personas.

2 Estructuración: no es una conversación espontánea, sino planificada.

3 Finalidad: surge como necesidad para conseguir una finalidad de estudio de un individuo o situación concreta.

4 Situación asimétrica: se establece una relación entre dos elementos asimétricos, entrevistador y entrevistado.

5 Proceso bidireccional: a pesar de la situación asimétrica, la información fluye en ambos sentidos.

6 Adopción de roles específicos: ambas partes adoptan su papel y lo ejercen en consecuencia.

Debemos entender la entrevista en tres dimensiones:

1 Entrevista con el educador del niño: el educador es el adulto que más tiempo pasa con el niño durante la jornada escolar. Es quien mejor le conoce fuera del ámbito familiar y el que más información del proceso escolar y curricular del alumno puede ofrecernos. Se deben establecer cauces de comunicación con el tutor y construir un proceso bidireccional de información.

2 Entrevista con la familia: que será el agente que más información de fuera del entorno escolar pueda aportarnos. Hay que buscar espacios de comunicación fluida con la familia, ya que aportarán una perspectiva distinta a la del ámbito escolar.

3 Entrevista con el niño: la entrevista individual con el alumno que pretendamos estudiar será el elemento más revelador, ya que podremos observar de forma directa e individual determinados comportamientos, conocimientos o conductas que no se dan en grupo.


Es muy importante que la entrevista se realice con participación del padre y de la madre siempre que sea posible, será mucho más efectiva, debido a la importancia de tener el punto de vista de ambos. De esta manera se fomenta también una buena relación familia-escuela siendo esta beneficiosa para el niño y niña.

En cualquiera de las modalidades de entrevista señaladas, esta se compondrá por una serie de preguntas que se plantearán a la o las personas entrevistadas con un fin concreto y planificado.

En las entrevistas hay que aprovechar el recurso del contacto directo e inmediato para registrar, no solo las respuestas concretas a las preguntas planteadas, sino también toda aquella información lingüística o corporal que el entrevistado deje entrever, teniendo muy en cuenta sus reacciones emocionales y el grado de confianza que denote hacia el entrevistador.

Hay dos aspectos de planificación muy importantes en el instrumento de la entrevista:

1 La batería de preguntas. La selección y formulación de estas deben estar muy cuidadas, para que se ajusten al objetivo de ofrecer información sobre los aspectos que queremos investigar.

2 El clima de la entrevista. Ha de provocarse un clima de confianza y cordialidad que favorezca la comunicación, intentando no forzar en ningún momento al entrevistado para evitar que adopte una postura defensiva y cerrada.


Sabía que...

Por ley, los educadores han de tener al menos una entrevista general con todos los padres del grupo del que son tutores para informarles sobre las líneas generales del proceso educativo de sus hijos. Asimismo, tienen una hora semanal en su horario no lectivo dedicada a la atención individualizada de aquellas familias que lo necesiten.

Cuando el niño accede por primera vez al centro escolar se suele pasar una entrevista personal escrita, igualmente se suele hacer una entrevista personal individualizada.

Türler ve etiketler
Yaş sınırı:
0+
Hacim:
581 s. 169 illüstrasyon
ISBN:
9788491982579
Yayıncı:
Telif hakkı:
Bookwire
İndirme biçimi:
epub, fb2, fb3, ios.epub, mobi, pdf, txt, zip

Bu kitabı okuyanlar şunları da okudu