Kitabı oku: «El regalo del lobo»

Yazı tipi:


IRENE HENCHE ZABALA

Psicodramatista y psicoterapeuta familiar, ha trabajado en educación como psicóloga y asesora de formación del profesorado, sobre todo en el área de necesidades especiales.

En 1986 creó el método al que llamó Psicodrama Simbólico, que rescata las versiones arquetípicas de los cuentos de hadas, y que desarrolla por primera vez en esta obra.

En la actualidad, es psicoterapeuta y se dedica a escribir y a impartir seminarios y conferencias de Psicodrama Simbólico en España y en diversos países.

Los cuentos de hadas son patrimonio de la humanidad, como las pinturas rupestres, las catedrales, las sinfonías o las obras maestras de la pintura.

Irene Henche Zabala tuvo la intuición, hace más de treinta años, de que el lenguaje simbólico de los cuentos de hadas podía servir para ayudar a identificar y sanar traumas y bloqueos emocionales. Aunque inició su trabajo con niños, ha desarrollado una metodología terapéutica para todas las edades, el Psicodrama Simbólico, que expone por primera vez en esta obra.

Este libro ofrece un recorrido por algunos de los cuentos más interesantes y conocidos de la historia para enseñarnos a aprender una lengua olvidada que habita en nuestro interior, un lenguaje perdido que solo comprendemos cuando estamos dormidos.

Frente a las visiones simplistas o ideológicas, que desdeñan los cuentos de hadas por infantiles o reaccionarios, la autora nos muestra que no hemos sabido profundizar en su mensaje más transcendente y sanador.

El regalo del lobo ayuda a que toda persona pueda potenciar su originalidad y creatividad, mejorar su evolución personal e incluso realizar una profunda transformación de su guión de vida.

EL REGALO DEL LOBO

Irene Henche

EL REGALO DEL LOBO

Psicodrama Simbólico y cuentos de hadas


El regalo del lobo

Psicodrama Simbólico

y cuentos de hadas

© 2021, Irene Henche

© 2021, Arzalia Ediciones, S.L.

Calle Zurbano, 85, 3º-1. 28003 Madrid

Ilustraciones de cubierta: Ricardo Sánchez

Diseño de cubierta, interior y maquetación: Luis Brea

ISBN: 978-84-17241-92-6

Producción del ePub: booqlab

Todos los derechos reservados. Esta publicación no puede ser reproducida, ni en todo ni en parte, ni registrada en o transmitida por un sistema de recuperación de información en ninguna forma ni por ningún medio, sea mecánico, fotomecánico, electrónico, magnético, electroóptico, por fotocopia, o cualquier otro, sin el permiso por escrito de la editorial.

www.arzalia.com

Índice

Prólogo

Agradecimientos

Introducción

PRIMERA PARTE. EXPLORANDO EL UNIVERSO DE LOS SÍMBOLOS

1. Hamlet

2. Un mapa y una brújula

3. Aprendiendo la lengua de los símbolos

4. La naturaleza de los cuentos de hadas

5. El Psicodrama Simbólico

6. El guion existencial

SEGUNDA PARTE. LOS DOCE CUENTOS

7. El reloj se pone en marcha

8. Los Siete Cabritillos y El Lobo. Estoy a salvo

9. Caperucita Roja. La segunda piel

10. Los Tres Cerditos. La casa

11. La Casita de Chocolate. La búsqueda del paraíso

12. Pulgarcito. La aparición de la conciencia

13. La Reina de las Abejas. La totalidad de la infancia

14. El Patito Feo. La diferencia y la diferenciación

15. Pinocho. La obra que cobra vida

16. Cenicienta. El lugar propio

17. La Bella Durmiente. El cuento de los cuentos

18. Blancanieves. La madre quiere matar a su hija

19. La Bella y la Bestia. La Sombra en el interior

20. El cine de Walt Disney y los cuentos de hadas

21. Otros cuentos fundamentales

TERCERA PARTE. LOS TESOROS QUE SE OCULTAN EN LOS DOCE CUENTOS

22. Los personajes femeninos y masculinos en los cuentos de hadas

23. El despertar de lo femenino

24. El viaje del héroe a través de los Doce Cuentos

25. El regalo del lobo

26. El conflicto y la Sombra en los Doce Cuentos

27. La dimensión transgeneracional del Ánimus y el Ánima

28. Los otros personajes femeninos del patriarcado

CUARTA PARTE. EL PSICODRAMA SIMBÓLICO EN ACCIÓN

29. Los personajes internos y los guiones existenciales transformados

30. Rematrizar el propio guion de vida. El adentro y el afuera

31. Una aproximación al Método Simbólico aplicado

32. La reconstrucción materna interior

Bibliografía

Prólogo

Llevo más de treinta años trabajando con los cuentos de hadas. Empecé a apasionarme con estas historias mientras desarrollaba mi actividad docente en la escuela, centrada en niños con dificultades en su desarrollo y su autoestima. En esa época, coincidiendo con mi periodo de formación en psicodrama, se me ocurrió formar grupos y poner en práctica en ellos lo aprendido: surgió así la idea de hacer psicodrama con los cuentos de hadas, una experiencia que resultó tan intensa y creativa para los alumnos que me enamoré de estos relatos cuyo universo he seguido explorando durante toda mi vida.

A medida que me iba adentrando en la escritura de estas páginas, fui descubriendo que era esencial rescatar los significados de estas hermosas historias. Como una restauradora de obras de arte que han sufrido el paso del tiempo o la huella de agentes nocivos, he ido despojando a los cuentos de esas capas que ocultan su belleza intrínseca y su gran valor.

El libro se centra especialmente en la recuperación de versiones arquetípicas de los cuentos de hadas y en la comprensión de su simbología latente mediante el aprendizaje de la lengua de los símbolos, un lenguaje perdido, que solo recuperamos cuando estamos dormidos, durante la creación de sueños, y es esencial que el ser humano lo recobre también cuando está despierto. Los cuentos de hadas son patrimonio de la humanidad, como lo son las pinturas rupestres, las catedrales y todas las grandes obras de la cultura. Mi objetivo profundo es mostrar su verdadera naturaleza, su belleza, su luz y su sombra, y restituir el universo metafórico que habita en ellos.

Desde la Ilustración y la Revolución Industrial hemos creído que podíamos controlarlo todo con la razón y con la técnica. Esa inflación del yo ha sido y sigue siendo muy cara; entre otras cosas, ha traído dos guerras mundiales, el nazismo y, en la actualidad, la amenaza de destrucción del planeta como consecuencia del cambio climático.

A lo largo de la evolución siempre ha habido personas sensibles que han guardado los recuerdos y las fantasías de la comunidad y los han transmitido oralmente a través de ficciones, permitiendo a nuestra especie seguir encontrando sentido a la existencia. Y entre estas ficciones se encuentran los cuentos de hadas, uno de los legados que han perdurado durante siglos y han acompañado el laborioso devenir de los seres humanos, ofreciéndoles esos espacios de juego, de disfrute a través de la imaginación, que hacen que la vida merezca la pena ser vivida. Algunos elementos de significado de estos relatos vienen de la más remota antigüedad y perduran todavía sin perder su esencia.

En la actualidad, época de reivindicación de las mujeres y de recuperación del legado femenino a lo largo de la historia, algunas corrientes de pensamiento han puesto el foco en los cuentos de hadas, dando por hecho que fomentan un modelo de relación tradicional y que forman parte del entramado de poder ideológico y político para mantener la sumisión de las mujeres. Mi reflexión es que las mujeres, principales transmisoras de los cuentos, han ido depositando en estos relatos el protagonismo prohibido para ellas en la vida pública. Eso explica el surgimiento de una de las grandes ideas de algunos cuentos prototípicos, el despertar de la mujer, la restitución de lo femenino, un contenido que se manifiesta de manera simbólica, primero porque este es el lenguaje del inconsciente, en el que hablan los cuentos, y segundo porque si la necesidad de otorgar un papel a la mujer se hubiera expresado de manera discursiva, esto habría sido condenado.

Veamos lo que dice Irene Vallejo en su libro El infinito en un junco:

A lo largo de los tiempos han sido sobre todo las mujeres las encargadas de desovillar en la noche la memoria de los cuentos. Han sido las tejedoras de relatos y retales. Durante siglos han devanado historias al mismo tiempo que hacían girar la rueca o manejaban la lanzadera del telar. Ellas fueron las primeras en plasmar el universo como malla y como redes*.

Así que, precisamente, los cuentos de hadas recogen la dimensión femenina que ha sido relegada y marginada a lo largo de la historia. Estas heroínas de los relatos que despiertan son las protagonistas. Escuchemos los mensajes de esas contadoras sensibles y visionarias que nos dejaron su legado en este material mágico de los cuentos de hadas para que esta dimensión pudiera permanecer viva.

La confusión reinante entre la ficción y la realidad, entre lo simbólico y la vida cotidiana, me hace considerar urgente y de la máxima necesidad recuperar los cuentos de hadas tal y como son, realzar sus contenidos arquetípicos y hacer perdurar su belleza.

Justamente porque estas historias son una de las vías para recobrar el universo simbólico, ese lenguaje olvidado del que habla Erich Fromm, es prioritario conservarlas y custodiarlas en su esencia, respetando su naturaleza y sin contaminarlas con ideologías de ningún signo.

Esta es la principal misión de este libro, ofrecer un recorrido a través de una serie de cuentos de hadas, mostrando sus contenidos desnudos, perfectos, y ayudando a comprender que estas obras de arte seculares pueden enseñarnos no lecciones morales ni conductas ejemplares, sino a escuchar la voz de esa lengua olvidada que habita en nuestro interior.

El otro gran propósito del libro es acabar con la idea, el lugar común, de que los cuentos de hadas son solo para niños y abrir su universo a todos los seres humanos en cualquier etapa de su ciclo vital.

Y finalmente, estas páginas buscan también presentar el Psicodrama Simbólico como un modelo de trabajo con los cuentos de hadas que permite obtener valiosísimos frutos de ellos.

_________

* Vallejo, pág. 384.

Agradecimientos

Quiero expresar mi agradecimiento a las personas que me han acompañado en el proceso de escritura de este libro.

En primer lugar a mi marido, José Luis Zamorano, por su ayuda constante en el perfeccionamiento de la redacción y en la configuración de la estructura. Sin su apoyo y dedicación, me hubiera sido muy difícil llevar a buen puerto esta aventura.

En este recorrido me ha acompañado también mi hijo Luis Manuel Zamorano Henche, psicólogo y músico, quien desde el otro lado del Atlántico me ha aportado su visión lúcida y sus comentarios inteligentes y alentadores sobre algunos fragmentos que le pedí que leyera.

Muchas gracias igualmente a mi gran amiga Vicky Abril por su lectura sabia y por sus sugerencias.

A lo largo de mi trayectoria he encontrado algunas personas que me fueron abriendo horizontes y que son el origen remoto de estas páginas. Quiero mencionar a Pablo Población, con quien descubrí el psicodrama, y a Carlos María Menegazzo, que ha sido una fuente de inspiración y de cuya amistad y sabiduría tengo la fortuna de disfrutar. Y, desde luego, a mi querida amiga Lilia Fornasari por su afecto, su apoyo y su estímulo para escribir.

Deseo nombrar también a Maurizio Gasseau, quien me abrió las puertas de Eranos, un lugar mágico, en el que Jung y los pensadores de su época se reunían para conectar con el lado sagrado de la naturaleza humana y en el que se han seguido celebrando encuentros de Psicodrama Junguiano. Haber entrado en ese espacio y haber impartido allí conferencias y talleres sobre el Psicodrama Simbólico de los cuentos de hadas, convirtiéndome así en una eranista, es un gran honor para mí.

Quiero expresar mi profundo agradecimiento a Christian Tauber, el discípulo junguiano de Marie-Louise von Franz, con quien descubrí verdaderos tesoros simbólicos en mis sueños que me han dado valiosas claves.

Finalmente, muchas gracias a Ricardo Artola, por su confianza y por haberme animado a escribir este libro y publicarlo.

Madrid, 24 de febrero de 2021

Introducción

En este libro vamos a hacer un viaje a través de la dimensión de los símbolos, de la fantasía, de la imaginación. Un viaje en el que nos acompañarán doce cuentos de hadas maravillosos, especiales, para ofrecernos su sabiduría y permitirnos recrear internamente sus significados según nuestra originalidad y nuestra creatividad. Desde sus orígenes, tanto individuales como colectivos, el ser humano crea la función simbólica y la ficción. La necesidad de símbolos y de ficciones es universal e inherente a la propia especie humana.

Para sumergirnos en la magia de estas historias, vamos a comenzar por una de las más grandes que se han contado, una que nos revela grandes arcanos de la existencia humana. Una de las mejores historias creadas por el gran sabio Shakespeare y, por tanto, una de las mejores historias de todos los tiempos: la historia de Hamlet.

PRIMERA PARTE
EXPLORANDO EL UNIVERSO DE LOS SÍMBOLOS


1
Hamlet

El destino es el que baraja las cartas, pero nosotros somos los que jugamos.

El tiempo no vuelve atrás, por lo tanto, planta tu jardín y adorna tu alma en vez de esperar a que alguien te traiga flores.

WILLIAM SHAKESPEARE

Érase una vez un joven príncipe danés, llamado Hamlet, que recibe la visita del fantasma de su padre, muerto poco tiempo atrás, el cual le emplaza a una nueva cita la noche siguiente. Acompañado por su amigo Horacio, acude a la reunión en la que el fantasma le revela algo esencial. El fantasma del padre de Hamlet le dice que mientras dormía fue asesinado por su propio hermano, que le administró un veneno derramándolo en su oreja. Murió, por tanto, en pecado y con ello está condenado, al menos, al purgatorio. El príncipe queda conmocionado por esta revelación. Su tío se ha casado con su madre apenas un mes después de enviudar y ha ocupado el trono. A partir de entonces, la vida de Hamlet se desarrolla dentro de esta mentira, de este secreto criminal.

Afrontar esta verdad de una manera directa y abierta solo augura el fracaso, la neutralización y, con seguridad, la destrucción de Hamlet, un príncipe joven que aún depende de su madre y, en este momento, también de su tío. Su plan va a ser conseguir que la verdad salga a la luz. Para ello finge que ha enloquecido, aunque las frases que nacen de su aparente locura resultan demasiado inteligentes e incisivas, y no parecen provenir de una mente enajenada.

Hamlet va envolviéndolo todo en una trama surrealista y compleja, en la que su propio destino es puesto en riesgo. Su enamoramiento de Ofelia debe servir de elemento de confusión y de trampa para capturar a los villanos. Y sabemos que Hamlet abandona ese gran deseo de su vida, el amor, la búsqueda del emparejamiento, debido a que hay una tarea que es absolutamente prioritaria: restituir la justicia y permitir la salvación de su padre.

En la escena en que Hamlet va a la habitación de su madre para instarla con palabras muy duras a que le revele el secreto que ha mantenido hasta entonces, el joven, que ya siente muchas amenazas sobre sí, observa que algo se mueve tras las cortinas y, cegado por la furia, hunde su espada en el intruso, que, inesperadamente, resulta ser Polonio, el padre de Ofelia. A partir de ese momento, en la obra se irán sucediendo una serie de muertes, un destino ineluctable.

En sus reflexiones sobre la vida y la muerte, Hamlet nos transmite su pesimismo sobre el ser humano, la imposibilidad de escapar del destino, ni siquiera con la muerte, porque ¿quién podría asegurarnos que con la muerte haríamos desaparecer realmente nuestra conciencia? Este es el sentido del majestuoso monólogo: «Ser o no ser». En otro momento, nos muestra la vida humana como una obra de teatro: cada ser humano es un personaje que desarrolla toda una historia, ríe, llora, se enamora… Después, al cerrarse el telón, desaparece y ya no queda nada.

Hamlet descarta la opción del suicidio, aunque finalmente también él morirá. Y su legado habrá sido descubrir la verdad e impedir que el reino continúe sustentado en la mentira de una pareja de reyes bastarda, asesina y mentirosa. Su misión es restituir a su padre al lugar que le corresponde, de legítimo rey, aunque sea después de su muerte, aunque ello conlleve también la propia desaparición del príncipe. Porque este trastrocamiento del verdadero lugar que se ocupa en la familia, este crimen secreto, este casamiento emponzoñado tiene un precio sumamente alto, no solo en la generación en la que ha tenido lugar, sino en la siguiente. Así, Hamlet no podrá madurar, nunca podrá ser rey aun siendo el heredero. Nunca podrá tener una pareja y crear una nueva familia. Y Ofelia ya se le adelanta en la muerte.

Esta obra inconmensurable, inagotable, de la que únicamente he querido aportar un breve resumen, nos está revelando una serie de verdades profundas sobre el ser humano:

• Toda persona, en su tiempo de vida, desarrolla una historia de la que es protagonista, lo quiera o no.

• Esta historia de vida tiene un desarrollo dinámico, es decir, va construyéndose a lo largo de las etapas del ciclo vital.

• Las heridas o traumas que tienen lugar en una generación pasan a las siguientes generaciones.

• El propio proyecto de vida está totalmente condicionado por los legados recibidos de nuestros padres y de nuestra familia de origen.

Si un hijo, como es el caso de Hamlet, se encuentra en un lugar perverso que le hace atravesar su evolución hacia la vida adulta en una secuencia alterada, está abocado a poner orden en la generación anterior, para lo que se requiere conciencia y valentía. De cualquier modo, en el caso de Hamlet, su unión con su padre a través de la comunicación profunda e interior con su fantasma lo sitúa en un lugar que no es el de hijo, sino casi el de padre de su padre. Esta inversión de roles, este orden trastocado, compromete el guion existencial del hijo.

Algunas personas realmente hacen suyo un guion obstaculizador de sus padres o antepasados, y ello conlleva neurosis o psicosis. En muchos casos, la persona puede desarrollar su guion existencial de una manera parcial y se pregunta, incapaz de darse una auténtica respuesta, por qué no ha logrado cumplir tal o cual deseo, por qué su vida es profundamente incompleta e insatisfactoria.

Cuando el orden de las relaciones familiares queda tan sumamente trastocado como en el caso de Hamlet, cuando hay una situación traumática de gran calibre que permanece en secreto (en este caso, un asesinato), ello tiene que hacerse consciente y ha de ser reconstruido de alguna manera en toda persona que aspire a llevar una vida saludable. El joven príncipe se ve obligado a iniciar un proceso implacable en el que todo va a destruirse, como espejo de la brutal reacción desencadenada por tal infamia, sobre la que no se puede edificar un proyecto de vida personal; tampoco puede seguir adelante un reino con semejante ponzoña. Todos van a morir. Hamlet también, porque su guion existencial está truncado. Queda Horacio, su amigo del alma, que puede contar la verdadera historia y hacer que el reino, limpio y purificado con el fuego de la verdad, renazca.

Muchas personas no mueren como Hamlet, pero viven como muertos en vida. Uno de los grandes objetivos del Psicodrama Simbólico que desarrolla este libro es desvelar el guion interno que bloquea o desvirtúa la energía para desarrollar de una manera original, fluida y satisfactoria el proyecto de vida deseado.

Los grandes literatos, ya lo decía Freud, nos ofrecen una sabiduría inmensa sobre la naturaleza humana. Y Shakespeare es el gran sabio de todos los tiempos. El arte permite una catarsis y una reconstrucción, una aportación única y original para salvarnos de guiones que nos mantenían prisioneros. La sabiduría contenida en Hamlet me ha permitido mostrar una de las tres grandes coordenadas del Psicodrama Simbólico que se desarrolla en este libro: el guion existencial. Ahora voy a detenerme en otros aspectos relevantes de esta obra que conectan con otra de las grandes coordenadas: el psicodrama. El ejemplo que nos da Hamlet al hacer que la verdad salga a la luz a través de la representación teatral de una historia semejante es un hallazgo maravilloso. Podríamos decir que hallamos aquí un poderoso precursor del psicodrama, como también lo son determinados rituales primitivos y la tragedia griega.

En lugar de declarar abiertamente a su madre y a su tío que conoce la verdad, Hamlet opta por crear una situación propicia. Se le ocurre una idea genial: contratar a unos cómicos y pedirles que representen, en una celebración palaciega, justamente la historia que ha tenido lugar y que se mantiene en secreto. En un clima lúdico, se reproduce la escena del asesinato del padre. El efecto de esta representación es absolutamente decisivo, pues su tío y su madre se desequilibran al verlo ante sus ojos. Esta representación permite que se haga patente la verdad que el joven quiere desvelar, y produce en los implicados un intenso malestar y un enorme desasosiego. Su tío reacciona con violencia y quiere deshacerse de él: alejar a Hamlet del palacio, enviarle a Inglaterra y ordenar que le maten en cuanto desembarque. Su madre cae en una suerte de depresión.

La representación de los cómicos en Hamlet se sitúa en el espacio del como si y posee ese carácter lúdico que tiene el teatro. Atreverse a transitar por territorios enormemente peligrosos y dolorosos es más fácil mediante esta vía de tono festivo. En la obra, la escena representada es claramente un trasunto de lo ocurrido en realidad, lo que nos lleva a mencionar la evidente conexión entre la genial aportación shakespeariana y esa extraordinaria creación que fue el psicodrama de J. L. Moreno.

El psicodrama posibilita la toma de conciencia, una toma de conciencia mucho más poderosa. A partir de todo lo que he aprendido de este gran creador y de los psicodramatistas que han sido mis maestros, he creado una modalidad de psicodrama que se realiza fundamentalmente a través de tramas y motivos metafóricos y se denomina Psicodrama Simbólico. En él, la invitación es a sumergirse en relatos de un significado universal porque están llenos de la sabiduría de las imágenes arquetípicas. Y, de este modo, elijo como base los cuentos maravillosos o de hadas, porque en ellos la carga arquetípica es inmensa y de gran calidad. Y así, con esta aportación del universo simbólico dentro del psicodrama, inspirada en las enseñanzas de Carl Gustav Jung y Marie-Louise von Franz sobre los arquetipos, el inconsciente colectivo y la dimensión simbólica, se completa la tercera coordenada de este modelo.

En suma, a través del Psicodrama Simbólico podemos afirmar que la persona puede viajar no solo a su pasado, sino también a su futuro, porque este a menudo es rescatado y transformado. Este viaje se realiza a través del aquí y ahora del psicodrama, de manera que el tiempo se reunifica. Podemos decir que la persona recobra el tiempo, el tiempo perdido en el pasado y el que estaba potencialmente perdido en el futuro. La persona recobra su tiempo de vida.

₺318,50
Türler ve etiketler
Yaş sınırı:
0+
Hacim:
375 s. 9 illüstrasyon
ISBN:
9788417241926
Telif hakkı:
Bookwire
İndirme biçimi:
epub, fb2, fb3, ios.epub, mobi, pdf, txt, zip

Bu kitabı okuyanlar şunları da okudu