Kitabı oku: «Reconstrucción de una experiencia institucional de formación de docentes», sayfa 2
Marco Curricular Común
La propuesta para la creación del SNB fue discutida ampliamente con los principales actores de la educación media superior en el país, como lo son las autoridades educativas de los estados, la UNAM, el IPN y la Red de Bachillerato de la ANUIES. Además, fue sometida a la consideración del Consejo de Especialistas de la SEP y otros expertos en educación. Las sugerencias de estos actores fueron incorporadas a la propuesta de reforma.
Para elaborar el Marco Curricular Común del Sistema Nacional de Bachillerato (MCC) implicó, en primera instancia, definir un perfil común del egresado que podrá ser enriquecido en cada institución de acuerdo con su modelo educativo.
Este perfil reunió un conjunto de competencias genéricas, las cuales representan un objetivo compartido en la educación media superior. En él se formulan las cualidades personales, éticas, académicas y profesionales que se considera debe reunir el ciudadano joven en México.
El Acuerdo Secretarial núm. 442, por el que se establece el sistema nacional de bachillerato en un marco de diversidad, distingue cuatro ejes de la reforma integral de educación media superior:
1 Un marco curricular con base en competencias, representadas por una serie de desempeños terminales, estos últimos organizados en competencias genéricas, competencias disciplinares básicas, competencias disciplinares extendidas y competencias profesionales.
2 Definición y regulación de las modalidades de oferta.
3 Mecanismos de gestión.
4 Certificación complementaria del SNB.
De la misma forma, se indican los niveles para su concreción: interinstitucional, institucional, escuela y aula. Llama la atención la importancia que se indica sobre la labor docente para el éxito de la reforma desde el nivel del currículum impartido en el aula donde se responsabiliza a los docentes, para aplicar estrategias congruentes con el despliegue del MCC a partir de las acciones que se lleven a cabo en el aula, con el objetivo de asegurar la generación del perfil del egresado de la EMS.
La Universidad de Guadalajara inicia, en julio de 2006, un profundo análisis de su Bachillerato General, vigente desde 1993. El diagnóstico arrojó que el bachillerato general universitario presentaba una notable falta de congruencia en el modelo y los programas de estudio, ausencia de congruencia entre el perfil de egreso del Bachillerato General y los objetivos de los programas de estudio, un exceso y obsolescencia de contenidos, una escasa vinculación entre áreas de conocimiento y asignaturas, poca orientación propedéutica que no correspondía con las demandas del nivel superior, sobre el trabajo del docente, un desconocimiento del modelo académico por parte de los docentes, centrado en el aprendizaje cognitivo y basado en la reproducción de contenidos, estrategias didácticas diseñadas en función de la actividad docente (enseñanza), una evaluación centrada en el conductismo y el autoritarismo docente.
Esta primera propuesta de reforma del Bachillerato General por Competencias se publica a finales de 2007, siendo el primer bachillerato general universitario con un enfoque por competencias1 respecto de la formación docente. En esta propuesta, se describe un primer perfil docente, el cual se caracteriza por dos dimensiones importantes:
A las competencias técnico-pedagógicas para realizar su trabajo docente.
A la experiencia y desarrollo en un campo disciplinar específico.
En este marco se definen seis competencias pedagógico-didácticas:
1 Planifica procesos de enseñanza y de aprendizaje para desarrollar competencias en los campos disciplinares que considera la educación media.
2 Diseña estrategias de aprendizaje y evaluación orientadas al desarrollo de competencias y con un enfoque constructivo-cognoscitivo.
3 Desarrollo de criterios e indicadores de evaluación para competencias por campo disciplinar.
4 Gestiona información para actualizar los recursos informativos de sus asignaturas y enriquecer el desarrollo de las actividades, para lograr aprendizajes significativos y actualizados.
5 Utiliza las tecnologías de la información y la comunicación para diversificar y fortalecer las estrategias de aprendizaje por competencias.
6 Desarrolla estrategias de comunicación para propiciar el trabajo cooperativo y colaborativo en los procesos de aprendizaje.
Acuerdos secretariales y directivos
Para la implementación de la reforma fue necesaria la creación de al menos 14 acuerdos secretariales, entre los que destacan el núm. 444, por el que se establecen las competencias que constituyen el Marco Curricular Común del Sistema Nacional de Bachillerato (SNB). El acuerdo secretarial 447, por el que se forman las competencias docentes para quienes impartan educación media superior en la modalidad escolarizada. Del mismo modo, se crearon acuerdos derivados del Comité Directivo del Sistema Nacional de Bachillerato.
La formación docente en la RIEMS
Para dar respuesta a las necesidades de formación y capacitación señaladas en la reforma, nace en 2008 el Programa Formación de Docentes de la Educación Media Superior (PROFORDEMS), cuyo referente es el perfil docente para quienes impartan educación media superior establecido en el acuerdo secretarial 447, documento que describe el perfil docente para profesores que imparten educación media superior en modalidad presencial, constituido por un conjunto de competencias que están referidas al contexto de trabajo de los docentes del tipo educativo, independientemente del subsistema en el que laboren, y son transversales a las prácticas de enseñanza y aprendizaje de los distintos campos disciplinares.
El perfil docente considera ocho competencias a saber:
1 El docente organiza su formación continua a lo largo de su trayectoria profesional.
2 Domina y estructura los saberes para facilitar experiencias de aprendizaje significativo.
3 Planifica los procesos de enseñanza y de aprendizaje atendiendo el enfoque por competencias, y los ubica en contextos disciplinares, curriculares y sociales amplios.
4 Lleva a la práctica procesos de enseñanza y de aprendizaje de manera efectiva, creativa e innovadora a su contexto institucional.
5 Evalúa los procesos de enseñanza y de aprendizaje con un enfoque formativo.
6 Construye ambientes para el aprendizaje autónomo y colaborativo.
7 Contribuye a la generación de un ambiente que facilite el desarrollo sano e integral de los estudiantes.
8 Participa en los proyectos de mejora continua de su escuela y apoya la gestión institucional
El programa comenzó a funcionar como un esquema de financiamiento para la impartición de cursos de especialización y diplomados a los docentes de escuelas de educación media superior, que posteriormente se complementa con un proceso de certificación de las competencias adquiridas.
Participan en la formulación e implementación de este programa, la Asociación de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), quien se coordinó con 55 instituciones formadoras a lo largo de todo el país, mediante un segundo convenio de coordinación. La Universidad Pedagógica Nacional (UPN) desarrolló e impartió la “Especialidad en Competencias Docentes para la Educación Media Superior” en la modalidad de educación en línea, que tuvo como objetivos: ofrecer a los profesores una opción de profesionalización que les posibilite alcanzar un posgrado o bien una alternativa de actualización para los que carecen de grado, y desarrollar sistemáticamente las competencias docentes que permitan la transformación de sus prácticas, y la participación en los procesos de formación y certificación de los procesos de la educación media superior.
El Diplomado Competencias Docentes en el Nivel Medio Superior fue diseñado con la coordinación de la Dirección de Educación Media Superior de la ANUIES; participaron especialistas de la Universidad de Nuevo León, Universidad Popular Autónoma de Puebla, la Universidad Autónoma del Estado de México y la Universidad de Guadalajara.
El diplomado estaba constituido por tres módulos. El primero sobre la reforma integral de la educación media superior, con 40 horas, de las cuales se sugerían 30% en forma presencial y 70% a distancia. El segundo módulo, con énfasis en el desarrollo de competencias del docente en educación media superior, 100 horas totales, de las cuales se sugerían 60% presenciales y 40% a distancia. El tercer módulo tenía dos vertientes: la primera dirigida a docentes y competencias disciplinares, y la segunda a directivos y gestión institucional. Este módulo constaba de 60 horas, de las cuales se sugerían 70% presencial y 30% a distancia.
La primera generación inició en octubre de 2008; la segunda, en abril de 2009 y la tercera, en octubre de 2009.
La estadística básica que reportó la Secretaría de Educación Pública, para el nivel de educación media superior en el ciclo escolar 2012-2013, señala una atención en el país de 4´813,165 estudiantes en el ciclo escolar 2014-2015, en 1,926 planteles tanto públicos como privados; la eficiencia terminal se ubicaba en el 63.3% y con una población magisterial de 288,464 docentes.
La Reforma Integral a la Educación Media Superior, iniciada en el año 2008, generó una diversidad de políticas y estrategias para lograr la transformación y mejora de la calidad de los programas educativos del bachillerato en México, en sus diferentes modalidades, finalidades formativas, tecnológicas, profesionales y propedéuticas.
Los planteamientos de la reforma han puesto su énfasis en cuatro aspectos fundamentales: el primero referido a la creación y formalización del Marco Curricular Común (MCC) sustentado en el enfoque por competencias, lo que pretende generar, para la Educación Media Superior (EMS), identidad propia; el segundo elemento reconoce las diferentes modalidades con que funciona la EMS, en subsistemas reconocidos por la Secretaría de Educación Pública, lo que ha demandado su integración efectiva en la configuración de lo que es el Sistema Nacional de Bachillerato (SNB); la tercera vertiente pone el énfasis en las acciones profundas conducentes a la mejora y fortalecimiento del desempeño académico del estudiantado, en la lógica de fortificar a las escuelas para que logren indicadores de desempeño que implican el cambio de las prácticas docentes mediante acciones de formación amplias y significativas, los apoyos a los estudiantes, el fortalecimiento de la infraestructura de las escuelas y el desarrollo de evaluaciones integrales, que deberán considerarse en el contenido del SNB; y, finalmente, el cuarto punto referido al reconocimiento nacional de los estudios de la educación media superior, que implica la construcción de una identidad para la EMS, al compartir objetivos fundamentales con una certificación nacional complementaria que actualmente emite cada institución.
Sistema Nacional de Bachillerato
En nuestro país, el proceso educativo se realiza en ámbitos y condiciones muy diversas e incluye gran variedad de modelos educativos, por lo tanto, el cambio sugerido en la Reforma Integral de la Educación Media Superior (RIEMS) se concretará por etapas y durará un cierto tiempo. Es aquí donde una pieza muy importante de la RIEMS toma relevancia, el Sistema Nacional del Bachillerato (SNB).
Los planteles que ingresan al SNB son los que han acreditado y son reconocidos por su calidad. Para ello, se someten a una evaluación exhaustiva por parte del Consejo para la Evaluación de la Educación del Tipo Medio Superior (COPEEMS), que es el organismo con independencia técnica creado para ese efecto.
De acuerdo con los registros del COPEEMS, para el mes de marzo de 2016 hay 2,066 planteles incorporados en el SNB y cuentan con pronunciamiento favorable del Comité Directivo (CD) del Sistema, el cual es otorgado con base en el dictamen de evaluación practicada por el Consejo para la Evaluación de la Educación de tipo Medio Superior. Lo que significa que alrededor de dos millones de estudiantes, es decir, aproximadamente el 40% de la matrícula nacional en educación media superior, cursa programas reconocidos por su calidad.
Para el año 2014, el subsecretario de educación media superior señaló que se acreditarían 34 000 docentes a través del Programa de Formación de Docente de Educación Media Superior (PROFORDEMS) y se formarían 3300 directivos.
Si bien el esfuerzo institucional es importante en recursos como en la operación y desarrollo de una estrategia nacional para la formación de docentes y directivos, es innegable la necesidad de que las instituciones de educación superior se sumen al esfuerzo para conseguir los objetivos establecidos en el programa sectorial, específicamente para la educación media superior y el logro de sus metas propuestas. En este marco, una de las universidades públicas que se ha comprometido a ampliar el número de profesores acreditados y certificados en el marco del ingreso de sus escuelas Preparatorias al Sistema Nacional de Bachillerato, es la Universidad de Guadalajara.
A la fecha, este esfuerzo institucional se ha reflejado en el ingreso de 48 escuelas preparatorias al SNB, así como su programa de Bachillerato General por Áreas Interdisciplinarias del Sistema de Universidad Virtual y el Instituto Esperanza, escuela particular incorporada a la Universidad, lo que significa que en la Universidad se ha desencadenado una movilización integral rumbo a la calidad de su sistema de educación media superior.
Diplomados ofrecidos por otras instituciones
A partir de las disposiciones establecidas en el Acuerdo número 15 CDN2009, del Comité Directivo del SNB, la Universidad de Colima, la Universidad Autónoma de Yucatán y la Universidad de Guanajuato, diseñaron nuevos programas de formación de docentes para el nivel medio superior.
Por su parte, la Universidad de Colima, a principios del año 2015, implementó un programa denominado DIFORDEMS (Diplomado en Competencias Docentes en el Nivel Medio Superior), el cual tiene una estructura de cuatro módulos: El Módulo 01. Referentes teóricos de la RIEMS y el modelo por competencias en el NMS; Módulo 02. Orientación metodológica para el desarrollo de competencias docentes; Módulo 03. Ambientes idóneos de aprendizaje y Módulo 04. La certificación docente en competencia: análisis de proyectos de trabajo.
Por su parte, la Universidad de Yucatán desarrolló un programa de Diplomado en Competencias Docentes para el Nivel Medio Superior de Yucatán PROFORDEMSY, con una estructura basada en cuatro apartados en los siguientes términos: Módulo I. Mi compromiso profesional como docente frente a la RIEMS; Módulo II: Planeando el curso para la promoción de las competencias en el contexto Institucional, Módulo III y Módulo IV. Mi certificación, compromiso docente institucional. Competencias disciplinares.
El Diplomado en Competencias Docentes del Nivel Medio Superior (modalidad en línea) de la Universidad de Guanajuato
El programa de este diplomado, encabezado por Silvia Catharina van Dijk Kocherthaler, coordinadora de la maestría en Educación del Departamento de Educación de la Universidad de Guanajuato (Van Dijk Kocherthaler, Ibarra Manrique, Galván Martínez, & González Ontiveros, 2015) fue propuesto como un modelo educativo del presente y futuro, con una base filosófica y psicológica, ambas regidas por principios humanistas. Van Dijk expresó que “el armado didáctico” sigue los principios de la complejidad que permite la interdependencia y vinculación entre los diversos contenidos que lo componen, de igual manera promueve de manera sistemática la reflexión de las experiencias docentes, para traducirlas en acciones pertinentes y con congruencia respecto del modelo educativo propuesto por la RIEMS.
De manera particular, el programa está constituido por cinco módulos, cuyos contenidos generales están representados por:
Educación con un enfoque por competencias académicas para el nivel medio superior.
La centralidad del estudiante desde un enfoque sociocultural y constructivista.
La lógica epistemológica de las áreas disciplinares como base para las estrategias didácticas interdisciplinares.
El poder en el aula y la promoción del buen trato entre pares y por parte de los maestros.
La formación ciudadana y el ejercicio de sus derechos en los establecimientos escolares.
El programa formativo fue diseñado teniendo como referentes las competencias que constituyen el perfil docente del Acuerdo Secretarial 447. A través de los cinco módulos del diplomado, se abordan estrategias para desarrollar ocho de las once competencias del estudiante señaladas en el Acuerdo Secretarial 444 y que representan el perfil del egresado de Bachillerato en nuestro país, es decir, el diplomado promueve que los docentes desarrollen la capacidad de implementar estrategias y actividades para la promoción de competencias en sus estudiantes.
La estructura general del diplomado se concibió en función de atender tres áreas temáticas, a saber: enfoque sociocultural y constructivista, epistemología de las ciencias y el ethos en la práctica docente.
El proyecto se presentó como una opción formativa en modalidad en línea, al equipo de formadores de la Universidad de Guadalajara, pertenecientes al Sistema de Educación Media Superior, en acuerdo con la Coordinación General del Diplomado. El programa se implementó en modalidad mixta, es decir, con una serie de sesiones de encuentro donde el tutor acudió a una escuela sede, con la finalidad de conocer y socializar con los participantes.
De manera general, el proceso formativo inició caracterizando el enfoque de competencias y el diseño de estrategias lúdicas, a fin de lograr la motivación de los estudiantes y docentes, así como inducir al docente a conocer con detalle las características de sus alumnos, ubicando su trabajo, planificación y estrategias de acuerdo con su contexto, asumiendo que cada docente es un estratega que estudia su campo de trabajo y, con base en ello, planifica e implementa estrategias de enseñanza y aprendizaje con un enfoque basado en competencias.
Una novedad es que al iniciar el programa se establece un “pacto educativo”, es decir, un conjunto de compromisos por parte del docente participante (diplomante) con su tutor-asesor, en el que se clarifican, con apego a las realidades y al contexto que vive el docente, los compromisos para elaborar trabajos, actividades, participación en forma virtual, desarrollo de actividades en las sesiones de encuentro, así como los compromisos del tutor para el seguimiento, realimentación y verificación de actividades que se mediaron vía electrónica.
Una notable diferencia entre otros diseños del PROFORDEMS y la propuesta de la Universidad de Guanajuato, es la centralidad en el estudiante, la cual busca que el docente desarrolle capacidades para atender a las necesidades de los jóvenes, a través de estrategias y actividades en las que el docente es responsable de que sus alumnos descubran a qué quieren dedicarse al egresar, es decir, los motiva para descubrir su pasión y definir su futuro.
En un segundo gran momento se promueve, a través de diversas estrategias, que los estudiantes se empoderen de su aprendizaje y el papel del docente se caracteriza como el de acompañante, ante las iniciativas de los jóvenes y su proceso de formación, lo cual se constituye en un nuevo modelo en que se desarrollan libres y seguros de vivencias y experiencias que les permitan desarrollar habilidades sociales y formarse como seres humanos, como individuos y miembros de una colectividad, construir con ello un ambiente emocionalmente seguro. Este espacio se fundamenta en los aportes socioconstructivistas, así como el enfoque crítico y las aportaciones de Paulo Freire.
El tercer módulo ofrece a los participantes la oportunidad de reconocer sus saberes disciplinares y las implicaciones que conlleva la transferencia de esos conocimientos en procesos de aprendizaje para sus estudiantes y promueve que los participantes reflexionen sobre la necesidad de desarrollar las propias competencias, antes de aspirar a gestionar el desarrollo de las competencias de otros.
Enfáticamente, el cuarto módulo se trabaja sobre los roles de poder en el aula, induce al docente a la reflexión sobre las decisiones democráticas, la participación y el compromiso de los estudiantes con su propio aprendizaje. Se patenta el concepto de “empoderamiento”, donde los estudiantes son el eje de la acción y comparten el poder con el profesor, rigen en estos espacios los acuerdos, las normas de convivencia y las responsabilidades con el aprendizaje, la asesoría y la evaluación formativa orientada al desarrollo de competencias.
Como cierre del proceso formativo, el diplomado aborda, en su etapa final, la caracterización del estudiante como niño adolescente y al docente como garante de los derechos humanos de los estudiantes. Para ello, se reflexiona sobre el desarrollo físico, emocional, social, cognitivo, moral y ético.
De manera transversal, el diplomado persigue, como propósito central y formativo, la reflexión personal del docente a fin de promover en él la voluntad de transformación, y que estos cambios se vean reflejados en la innovación de su práctica también se induce el análisis de aquellos paradigmas que impiden resignificar y transformar la práctica en el aula, para establecer una distinta construcción de la realidad y de la actuación docente.
Al ser una modalidad mediada por las tecnologías, se ofrece la oportunidad de que el docente utilice las nuevas tecnologías, acercándose de manera directa a la comprensión de las actuales formas de comunicación de los jóvenes, mediante el uso de correo electrónico, mensajería instantánea, redes sociales y plataformas electrónicas de enseñanza y aprendizaje.
La estructura curricular del diplomado tiene su base en Módulos y Unidades de Aprendizaje, dentro de las que se comprende el trabajo en línea de carácter autónomo y virtual. En cada unidad se proponen actividades relacionadas con las competencias a desarrollar en el docente de Educación Media Superior (EMS).
La plataforma Moodle se constituyó en un instrumento de comunicación entre tutor y los miembros de su grupo, así como de los integrantes del grupo entre sí, y brindó los elementos para que los diplomantes tuvieran la oportunidad de desarrollar las actividades, mismas que promovieron las experiencias necesarias para un aprendizaje transformativo.
Para dar congruencia al enfoque del diplomado, cuyo eje central es el humanismo, y dar respuesta a la perspectiva sociocultural que plantea la Reforma Integral del Nivel Medio Superior (RIEMS), los tutores fueron capacitados a fin de generar una propuesta flexible, congruente y que respondiera al contexto donde se desempeña el profesor en formación. En este sentido, cobró especial importancia el acuerdo asentado en el “pacto educativo”, generando con ello una forma novedosa y original para la interacción, producción y realimentación de las actividades y las participaciones de los profesores. Esto sentó las bases para un nuevo modelo de evaluación y valoración, donde el énfasis estuvo centrado en reconocer los aportes del profesor sobre sus experiencias, reflexiones, puntos de vista, opiniones descritas en los trabajos solicitados. Esta acción implica, para los tutores, prestar atención a las personas que perciben, sienten, piensan y valoran.
En las sesiones de encuentro, el empleo del juego como mediador del aprendizaje, y la deconstrucción de paradigmas educativos, fueron fundamentales, así como del compromiso del docente para transferir las dinámicas y las actividades al aula, a fin de ver reflejado el desarrollo de las competencias docentes en las innovaciones de la práctica en el aula. En este sentido, gran parte de las evidencias generadas por los profesores fueron el resultado de la experimentación en el aula, la recuperación de la experiencia expresada en forma de textos, grabaciones, videos y escritos reflexivos.
Por otra parte, las actividades mediadas a través de la plataforma se diseñaron para ser desarrolladas durante la jornada laboral de los docentes, así como la dedicación individual para la elaboración de productos académicos, en los cuales el participante tuviera tiempo para reflexionar, sentirse, pensar y construir sus propias opiniones, aprender conceptos nuevos y comprender lo que significan en la práctica.
Las actividades sugeridas a los participantes son variadas, y en algunos casos seriadas, es decir, existe interdependencia y contraste de resultados. Los recursos proporcionados, asimismo, van desde lecturas con referentes y aportes teóricos, videos, películas, material audiovisual e incluso documentales testimoniales, que luego de ser revisados y cuestionados, sirvieron de base para la implementación del juego en aula, la experimentación de actividades reflexivas con los estudiantes y, sobre todo, para repensar la práctica docente.
Dado el carácter humano de la propuesta, una importante carga de trabajo para los diplomantes fue intercambiar sus ideas con los compañeros de grupo y con el propio tutor. En este aspecto, el diseño del diplomado permite incluir diversas estrategias de comunicación, como las redes sociales, mensajería electrónica y vía telefónica, con los cual se configura un modelo educativo flexible, abierto de permanente apoyo, orientador y de enriquecimiento mutuo.
Esta flexibilidad y apertura, basada en la comunicación y el mutuo compromiso del participante y del tutor, el diplomado también incluyó la opción de cursar el programa totalmente en línea y a distancia, atendiendo particularmente a docentes en situaciones específicas, tales como las distancias geográficas para acudir a las sedes establecidas para las reuniones de encuentro, atención a casos especiales de salud y otras basadas en obligaciones profesionales.
Es importante resaltar que la combinación de las sesiones de encuentro, realizadas en escuelas sede a donde acudían tutores y diplomantes de diferentes subsistemas, propició el intercambio de las experiencias entre los participantes y el propio tutor, configurando con ello procesos y relaciones entre las esferas física, emocional, cognitiva y valorativa de los participantes, es decir, se materializa el proceso formativo de quien aprende y de quien asume la responsabilidad como facilitador del proceso.